La Audiencia Nacional paraliza la expulsión de 15 kurdos

La Audiencia Nacional paralizó ayer en el último momento la expulsión de España y la repatriación de un grupo de kurdos y algunos turcos. Un auto dictado por la sala de lo contencioso administrativo de la Audiencia Nacional suspendió cautelarmente, hasta la resolución del problema, la orden de expulsión dictada por el Ministerio de Justicia e Interior.La decisión judicial estuvo a punto de convertirse en papel mojado. Cuando los jueces hicieron público el auto, el avión que debía devolver al grupo a Turquía ya había despegado del aeropuerto de Barajas, en Madrid. Faltaban pocos minutos para las diez de la mañana. La suerte, materializada en una escala en Barcelona, hizo el resto. El grupo permaneció unas horas en las dependencias policiales del aeropuerto de El Prat hasta que llegó el auto judicial.

La policía ordenó entonces que el grupo -formado por 15 personas, entre las que se encontraban varios niños, alguna mujer embarazada y un anciano- volviera a Barajas en el primer vuelo del puente aéreo. Ayer continuaban en la zona de tránsito de Barajas bajo la custodia de la policía, hasta que llegue la orden que les permita entrar en España, momento en el que la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) se hará cargo de ellos y los trasladará a sus centros de acogida.

Recursos de la CEAR

El auto de la Audiencia Nacional se dictó en respuesta a los seis recursos contenciosos administrativos que el lunes por la noche presentó la CEAR. El Ministerio de Justicia e Interior había rechazado que pasara a trámite la proposición de asilo solicitada por la asociación humanitaria para estos extranjeros. La gestión hecha por su presidente, Juan María Bandrés, ante el ministro Juan Alberto Belloch también resultó infructuosa.Sin embargo, la suerte no llegó de igual manera para los 39 kurdos que habían permanecido seis días en el aeropuerto de Barajas hasta conocer su futuro más inmediato: otros 19 ya habían sido enviados el lunes a Casablanca (Marruecos) por decisión del ministerio, antes de la intervención judicial. Otros cinco miembros de una familia kurda permanecieron en Madrid porque uno de ellos, una niña, está hospitalizada con pulmonía.

Hemos puesto una pica en Flandes, porque no hay un precedente de este tipo a nivel internacional", aseguró Juan María e tras conocer la decisión de la Audiencia Nacional. El presidente de la CEAR alabó a los jueces por "su diligencia" en este caso y criticó que Belloch "ni siquiera ha querido entrar a examinar a fondo el teina"; asimismo aprovechó para pedir al Gobierno que rectifique su postura.

Más dura fue la respuesta de Izquierda Unida (IU). Su diputado Diego López Garrido pidió la comparecencia del ministro de Justicia e Interior para que explique "la expulsión sumaria" de los kurdos.