_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Cansancios

Manuel Campo Vidal es un excelente conductor del mensaje audiovisual, como hay cuerpos buenos, y otros malos, conductores del calor o de la electricidad. Pero el otro día le ocurrió lo mismo que solía sucederle a cualquier equipo de fútbol que se enfrentara al Las Palmas de los buenos tiempos: Martín, Tonono, Guedes, Germán... Aquel Las Palmas jugaba como si hubiera venido a este mundo a sestear y poco a poco la indolencia de los jugadores canarios se contagiaba al adversario. Era el momento esperado para que Guedes hiciera un pase magistral y el gol despertaba al árbitro, a los espectadores y al portero rival cuando ya era demasiado tarde.En el encuentro de Antena 3, Felipe González apareció cansado de sí mismo, cansado de ser tan previsible, y progresivamente, de Manuel Campo Vidal iba emergiendo el zzzzzzz con el que se suele indicar la somnolencia de los personajes en los tebeos. Aunque el entrevistador cambiaba de ritmo de voz e incluso de expresión para animar el espectáculo, el entrevistado no colaboraba y se arrastraba por la pantalla con el único deseo de salirse de ella, de que acabara cuanto antes la entrevista, un pasito más para alargar la legislatura.

Los enemigos del alma y de Felipe González se indignaron cuando el presidente proclamó que las elecciones generales podrían anticiparse al primer semestre de 1996, al segundo o bien no anticiparse. No. No era pitorreo. Es que el presidente del Gobierno es pura raya de disco rayado, y Manuel Campo Vidal, consciente de que los telespectadores se habían apuntado al programa Tiempos difíciles y no a la retransmisión en directo de un duelo de ronquidos, optó por dejar la cara puesta mientras pensaba: ¿Qué he hecho yo para merecer esto? Finalmente nos deseó un feliz fin de milenio.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_