El PNV abre una ofensiva desde el Gobierno vasco por el diálogo con ETA

El Partido Nacionalista Vasco y sus representantes en el Gobierno de Vitoria añoran los tiempos de José Luis Corcuera al frente del Ministerio del Interior y el amparo del ex ministro al diálogo más o menos directo y las "tomas de temperatura" con ETA. El consejero de Interior, Juan María Atutxa, habitualmente reacio a hablar de conversaciones con la organización terrorista, atribuyó ayer a la debilidad del Gobierno central la imposibilidad de mantener "toques o conexiones" informales. El vicelehendakari, Juan José Ibarretxe, abogó también por dialogar más "con todos y entre todos".

Atutxa declaró a Radio Euskadi que esos "toques o conexiones" son el camino para que después puedan producirse contactos "más formales". Según el consejero de Interior, "un Gobierno débil", en referencia al Gabinete de Felipe González, "está en manos de las presiones que pudieran ejercerse desde la oposición y desde algún medio de comunicación".Más tarde, en Barcelona, donde mantuvo una entrevista con el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, sobre el despliegue, de la Ertzaintza (policía autónorna), el consejero de Interior vasco manifestó la necesidad de impulsar las medidas de reinserción de los presos de ETA y defendió una mayor proximidad a Euskadi de los reclusos, para que las familias no tengan que realizar largos desplazamientos para poder visitarles.

Atutxa reiteró en la capital de Cataluña que es partidario del diálogo entre el Gobierno central y ETA cuando llegue el momento oportuno, y subrayó que a ese diálogo no debe ser ajeno el Gobierno vasco.

Por su parte, el vicelehendakari Ibarretxe se refirió de forma inequívoca en Bilbao a la necesidad del diálogo con la organización terrorista, aunque "con exquisitez y discrección", explicó, "porque trasladarlo de forma cruda a la ciudadanía puede ser malinterpretado".

En un encuentro con informadores, Ibarretxe consideró "irresponsable" que en una sociedad como la vasca "que tiene un problema" se descarte hablar y utilizar "el diálogo como mecanismo necesario de resolución de conflictos". Los partidos políticos, según el vicelehendakari, deben dejarse "de tiquis-miquis" y ponerse "a trabajar" porque en la situación actual "es una irresponsabilidad" que cada uno ande por su lado.

La aparición pública el mismo día del número dos del Gobierno vasco y del consejero del Interior para defender el diálogo con ETA se produce a pocas horas de que el lehendakari José Antonio Ardanza, en una entrevista en la Cadena SER, manifestara su malestar con la política de Juan Alberto Belloch de cerrar todos los canales de comunicación con la organización terrorista.

Según Ardanza, sólo es capaz de mantener contactos con ETA para "tomar la temperatura" o conseguir información un Gobierno fuerte. El lehendakari recordó las conversaciones de Argel entre el Gobierno y ETA y argumentó que en la actualidad serían imposibles. "Los del PP y el Abc lo asarían [al Gobierno], no hay capacidad para hacerlo", agregó.

El enfado de Ardanza y el PNV con Belloch es patente desde la semana pasada, cuando el Ministerio de Justicia e Interior manifestó su preocupación por la situación en las calles del País Vasco y dio a entender que los desórdenes están rebasando a la Ertzaintza. En la argumentación del lehendakari, no obstante, parece pesar también la tensión creciente en Euskadi y los enfrentamientos constantes entre los pacifistas y portadores del lazo azul y el entorno civil de ETA.

"SI no hay un intento de contactar", señaló, "como antes decían Corcuera y compañía, para saber qué pasa aquí, qué se piensa, nunca vamos a resolver el problema".

Si es así, según el lehendakari, si no hay una "solución consensuada", cada cual "estará atrincherado en su propio castillo y ahí permaneceríamos todos, tirándonos piedras de un lado a otro". Los más perjudicados, para Ardanza, serían "esa inmensa mayoría de ciudadanos de a pie que anda por debajo de las murallas".

El PNV ha iniciado recientemente conversaciones bilaterales con Eusko Alkartasuna (EA), el otro partido nacionalista que participa en el Gobierno vasco, para buscar juntos una posición común frente a la violencia. Según ambos partidos, son los nacionalistas los que deben tener un papel preponderante en la búsqueda de una salida al terrorismo, en lo que parece un movimiento previo a propuestas de más calado aplazadas hasta que ETA libere al empresario José María Aldaya.

El portavoz del Ministerio de Justicia e Interior Insistió ayer en la posición del departamento: "No hay el menor cambio. Con ETA no cabe negociación, conversación, toma de temperatura, ni ningún otro eufemismo similar. Lo único que hay que negociar con ETA es dónde entrega las armas. Mientras tanto, el ministerio sigue apostando por la lucha policial contra el terrorismo".