LA PRINCESA ESTÁ TRISTE
Haciendo caso al próximo capítulo de la biografía que Andrew Morton está escribiendo sobre Diana, la princesa de Gales no sólo está triste, además se ha entregado a la bebida y es adicta a los tranquilizantes. Según relata Morton en Diana: su nueva vida, segunda entrega de la biografía que comenzó en 1992 con Diana: su verdadera historia, la princesa, desde que se separó del príncipe Carlos, lleva una vida triste y solitaria y muchas noches se acuesta a las ocho de la tarde tras ingerir una buena dosis de somníferos. Unportavoz del Palac¡o de Buckingham se ha apresurado a calificar de "chisme le segunda mano" el retrato patético le Diana que saldrá pronto a la venta Morton, que firma basarse en confidencias de amigos íntimos de princesa, cuenta que Diana, a sus 34 años, apenas sale, hace ejercicio físico obsesivamente, tiene cada vez menos amistades y sólo se dierte cuando va de compras. Añade Morton que lady Di con frecuencia necesita un buen trago de vodka para calmar sus nervios antes de participar en algún acto oficial y es adicta al Prozac, un antidepresivo que ella utiliza para controlar la bulimia.-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.