Zedillo combate la crisis mexicana con un nuevo ministro del Interior

La crisis política que atraviesa México, que tiene su máximo exponente en la interrupción del diálogo entre el Gobierno y la oposición para la reforma del Estado, impulsó el miércoles al presidente Ernesto Zedillo a sustituir al secretario de Gobernación, Esteban Moctezuma, por Emilio Chuayffet, hasta ahora gobernador del Estado de México. A pesar de la alarma desatada en algunos sectores que asocian a Chuayffet con la línea dura del Partido Revolucionario Institucional (PRI), los dirigentes de la oposición, conocedores de su capacidad de compromiso, han optado por darle un margen de confianza que Zedillo espera aprovechar.

El diálogo con los partidos de oposición para pactar la democratización del sistema político mexicano, ya anquilosado, fue desde el principio no sólo uno de los puntales del proyecto de Ernesto Zedillo, sino su tabla de salvación en un momento de intensa desintegración política, que se extendía a su propio partido.El acercamiento al conservador Partido de Acción Nacional (PAN) y al izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD) se rompió bruscamente a raíz de los conflictos electorales en los Estados de Tabasco y Yucatán, donde el PRI obtuvo las gobernaturas en medio de acusaciones de fraude. Es en este contexto en el que diversos analistas sitúan la salida de Moctezuma, de hecho uno de los artífices del diálogo.

"La situación se le había ido de las manos a Moctezuma. La buena voluntad no fue suficiente", comenta un observador. La oposición habla de "ingobernabilidad" y la situación ha empeorado tras los enfrentamientos entre un grupo de indígenas y la policía en Aguas Blancas, el Estado de Guerrero, que se saldó con la muerte de 17 campesinos. El PRD ha exigido al presidente mexicano el cese de Rubén Figueroa, gobernador del Estado de Guerrero, al considerarle culpable de la "agresión policial", que han calificado de "matanza".

Así las cosas, Zedillo ha vuelto sus ojos a un hombre de probada experiencia política, Emilio Chuayffet, de 43 años., abogado que ha desarrollado su carrera en el Estado de México. El que este Estado sea feudo de uno de los dirigentes de la vieja guardia priísta, el acaudalado ex secretario de Agricultura Carlos Hank, ha llevado a asociar a Chuayffet con la línea dura del partido. "Con su nombramiento la línea autoritaria gana terreno", afirma Alejandro Rojas, diputado renovador del PRI. Otras fuentes consideran que uno de los cometidos del nuevo secretario de Gobernación será meter en cintura a los caciques locales del PRI que, como ha sucedido en Tabasco o Yucatán, boicotean los impulsos reformistas del Ejecutivo.

Emilio Chuayffet mantiene buenas relaciones con la dirección dé los partidos de la oposición, el PRD y del PAN, que guardan buen recuerdo de su gestión al frente del Instituto Federal Electoral entre 1991 y 1993, y que han acogido favorablemente el nombramiento del nuevo secretario de Gobernación. Lo que nadie cuestiona es que Chuayffet representa el "operador político" pragmático necesario en tiempos de crisis.