Emilio Butragueño
Como consecuencia del homenaje a Emilio Butragueño, me gustaría hacer algunas reflexiones.Es claro que para que un futbolista destaque hace falta estar rodeado de un buen equipo que acompañe. Pero, debido a su gran capacidad goleadora, elegancia en el juego, humildad, coraje y compañerismo, estas personas se convierten en las cabezas visibles de un equipo, incluso anulando a compañeros más capacitados técnicamente.
Todo esto no es una casualidad y es muy difícil de lograr; es por ello que, cuando surge un deportista de este calibre, debemos reconocerlo, dejando aparte nuestra subjetividad partidista, y ser objetivos y realistas.
Ya es hora de que sepamos reconocer y decir públicamente que tal o cual persona es destacada dentro de su faceta. En este caso, sería como deporte el fútbol y como deportista Emilio Butragueño.
Hay que recordar que en esta piel de toro donde vivimos no estamos acostumbrados a grandes figuras deportivas, pero cuando aparecen reconozcámoslas para que sirva de aliciente y estímulo a las futuras promesas.-
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