Pasqual Maragall vence a Miquel Roca en la 'batalla de Barcelona'

Pasqual Maragall, de 54 años, venció ayer ampliamente en las elecciones municipales de Barcelona. El alcalde en funciones obtuvo 16 concejales, mientras que el candidato nacionalista, Miquel Roca, sólo logró 13, cuando se llevaba escrutado el 97,5% de los votos. Los nacionalistas fueron los primeros sorprendidos de este serio revés, que no había sido detectado por ninguna de las encuestas. El Partido Popular registró un fuerte ascenso, que le permitiría alcanzar siete concejales en el Ayuntamiento barcelonés.

Iniciativa per Catalunya-Els Verds incrementó el número de votos, pero sigue con tres representantes. La entrada en el consistorio de Pilar Rahola, de Esquerra Republicana de Catalunya, es otro rasgo relevante de la jornada electoral de ayer.El resultado convierte a Maragall en virtual alcalde de Barcelona, ciudad que gobierna desde 1982. El alcalde en funciones compareció rápidamente en la sede socialista para anunciar y celebrar el resultado. Lleno de entusiasmo, Maragall manifestó: "Barcelona ha dicho que sí a su futuro y a confiar en ella misma. Hemos ganado". E insistió eufórico: "Ha ganado la izquierda, ha ganado el progreso en Barcelona y en toda Cataluña".

Roca también reconoció rápidamente su derrota y felicitó a Maragall. "No he ganado estas elecciones", dijo, pero "serviré a Barcelona con la misma lealtad como si hubiese ganado", en la oposición.

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, manifestó que mantendría su apoyo al Gobierno socialista, aunque advirtió "que si los pactos no se cumplen por la fuerte debilidad del PSOE habrá que replantearse los apoyos". El dirigente nacionalista precisó "si se confirma una derrota muy profunda del Partido Socialista debe ser este partido el que saque sus propias conclusiones", añadiendo que los partidos que forman CiU son "partidos de palabra".

Roca ha perdido en número de votos y también la posibilidad de alcanzar la alcaldía mediante una hipotética alianza con el Partido Popular. Nacionalistas y conservadores no llegan al 50% de la representación municipal. Probablemente el fuerte ascenso del Partido Popular ha sido cosechado en buena parte a partir de votos procedentes del campo nacionalista. Roca ha recolectado un menor porcentaje de votos que el conseguido por el anterior candidato nacionalista, Josep Maria Cullell, en los dos comicios precedentes.

El resultado de Barcelona es similar a lo sucedido en el resto de Cataluña: subida espectacular del Partido Popular y ascenso importante de Iniciativa per Catalunya-Els Verds y Esquerra Republicana de Catalunya, aunque con alguna excepción. Los socialistas bajan, aunque mucho menos de lo ocurrido en el resto de España y están en condiciones de mantener la mayoría de sus alcaldías. También retrocede Convergència i Unió, con algunas excepciones, como Badalona.

Una primera aproximación de lo ocurrido hace pensar que los populares, pero también ERC, se han llevado una parte del voto deCiU, y que el PP, por otro lado, e Iniciativa le han pegado un bocado al voto socialista. Mal resultado, por tanto, para las esperanzas de CiU, y un suspiro de alivio para el PSC, que lo podía haber tenido peor. El PSC se mantiene como el partido más votado en el global de Cataluña, con el 33,07% de los sufragios y 1.667 concejales (36,8% y 1.839 concejales en 1991), y CiU el primero en regidores, con el 29,97% de los votos y 4.115 concejales (33,21% y 4.354 en 1991). El PP obtiene el 12,33% y 445 concejales (6,7% y 256 concejales hace cuatro años); Iniciativa per Catalunya obtiene ahora el 11,98% y 373 concejales (9,4% y 254 concejales en 1995), y ERC, con el 6,16% se hace con 488 concejales (3,3% y 229 hace cuatro años).

La Diputación de Barcelona seguirá en manos de la izquierda (PSC-IQ que conserva la mayoría absoluta. El PSC ha obtenido 22 diputados (2 menos); CiU, 18 (1 menos); IC, 6 (igual); PP, 4 (2 más), y ERC, 1 (no tenía ninguno).