Los nacionalistas vascos exigirán el desarrollo del Estatuto si González les pide la entrada en el Gobierno

El ministro de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, defiende un gobierno de coalición con el PNV y CiU tras las elecciones municipales y autonómicas del próximo domingo. En unas declaraciones a El Periódico de Catalunya, Belloch dice que en la entrevista que mantuvo la pasada semana con el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, le planteó la misma cuestión. El portavoz del PNV en el Congreso, Iñaki Anasagasti, respondió ayer que sólo será válida la oferta si la realiza el presidente del Gobierno, Felipe González, y recordó que los nacionalistas vascos condicionan su entrada en el Ejecutivo a que se complete el desarrollo del Estatuto de Gernika.Belloch manifiesta que el Gobierno con el PNV y CiU debía haberse constituido al comienzo de la legislatura, cuando González hizo la oferta en julio de 1993. El ministro de Justicia e Interior define a CiU como "una UCD a la catalana, un partido centrista y catalanista". De Pujol dice que "es un dirigente político que tiene más sentido del Estado que el que se le atribuye en el resto de España".

En cuanto a Arzalluz, señala el ministro que "es un demócrata cristiano básico". "En el PNV convive un sector de democristianos básicos y radicales con un sector progresista-socialcristiano, que sigue la doctrina social de la Iglesia. Antes de la escisión de Eusko Alkartasuna, hasta tenía algún sector socialdemócrata. Todo ello hace que en determinados temas tengan incluso una orientación progresista", afirma Belloch.

El portavoz del PNV en el Congreso, Iñaki Anasagasti, dijo ayer a este periódico, que las manifestaciones de Belloch no son nuevas y que no tendrán carácter de oferta formal hasta que no procedan del presidente del Gobierno, Felipe González.

Exigencia de compromiso

Anasagasti recordó que la posición del PNV ante la oferta de entrada en el Gobierno quedó clara en una Asamblea Nacional, del partido en julio de 1993. Los nacionalistas vascos decidierón entonces que una entrada en el Gobierno pasaba por un compromiso del Ejecutivo de culminar el desarrollo del Estatuto.

Anasagasti se mostró también muy crítico con el presidente del Partido Popular (PP), José María Aznar, al que acusó de cultivar un "culto a la personalidad absolutamente desaforado". Coincidió con las críticas de Pujol hacia Aznar al que acusó de "falta de talla política".

"Da la impresión de que la política municipal al PP no le importa absolutamente nada. Lo que tiene que hacer un líder político cuando va a gobernar no es dar carnaza barata a la extrema derecha, que se ve magníficamente representada en el PP. Nos parece lamentable, e insultar a la gente de una manera tan gratuita denota no sólo un error de bulto sino de talla", señaló Anasagasti.