Los serbios disparan sobre Sarajevo tras robar armas de un depósito de la ONU

Los depósitos de armas pesadas protegidos por los cascos azules de la Fuerza de Protección de las Naciones Unidas (Unprofor), y cuya utilización fue prohibida por el Consejo de Seguridad de la ONU en febrero de 1994 en un radio de 20 kilómetros alrededor de Sarajevo no sirven de mucho. Ayer, un grupo de serbios entró en uno de ellos y se llevó sin excesiva oposición un mortero de 120 y una pieza de artilería de 105 milímetros.Poco después de este robo de armas, dos civiles perdieron la vida a causa de la explosión de dos granadas de mortero, en el norte de la ciudad, una zona controlada por la Armija (Ejército bosnio de mayoría musulmana). Otra explosión en la zona de Butmir (al lado del aeropuerto) causó heridas a cuatro personas.

La paternidad de estos dos ataques apunta a los artilleros-serbios, según 1as primeras investigaciones. Un tercer civil perdió la vida a mediodía a causa del disparo de un francotirador que le dio en la cabeza. Ocurrió cerca de la presidencia, donde aún no se han podido levantar las protecciones (contenedores y planchas de hierro) existentes antes de febréro de 1994, cuando la ONU decidió retirarlas debido al fun cionamiento de los acuerdos que pusieron fin al trabajo sistemático de los tiradores emboscados.

En el norte de Bosnia, la actividad militar fue ayer muy intensa en la bolsa de OrasJe, en poder croata, y en Brcko, en poder serbio. En esa lucha se disputa e control del corredor de Posavina, clave para los serbios, pues une sus conquistas en Croacia

Bosnia occidental con las de Bosnia oriental y Serbia.

El frente político, muy relacionado con lo que sucede en Orasje, tiene su centro en Banja Luka, donde el partido del radical Radovan Karadzic estudia 1 propuesta de unificación de sus hermanos de Krajina (Croacia) Una eventual unidad entre lo serbocroatas y los serbobosnio podría, -según los expertos, empujar a Zagreb a ordenar el cruce de la frontera bosnia por Orasje y cortar el corredor de Posavina. El general jefe de la Armija, Rasim Delic, cree que si el Ejército croata da este paso, la toma d Posavina y Brcko será un hecho Y con ella, la separación de la fuerzas serbias en dos bloques debilitando así su poderío milita y su capacidad de abastecimiento, tanto en Krajina como grandes zonas de Bosnia central.