Muster mantiene su racha ante Bruguera en Roma

Los dos mejores jugadores del mundo en tierra batida disputaron ayer la final del torneo de Roma, uno de los más carismáticos del circuito. Y ganó el que está más en forma. El austriaco Thomas Muster, de 27 años, derrotó a Sergi Bruguera, de 24, por 3-6, 7-6 (7-5), 6-2, 6-3 tras 2h 50m de juego. Bruguera acabó desesperado, como suelen acabar todos sus rivales, al comprobar que Muster mantenía intacta toda su fuerza física en los últimos escarceos del encuentro. La de Roma era la primera final del año para Bruguera, que sigue sin conocer el triunfo en 1995.El austriaco parece invencible. Esta se presenta como su gran temporada. Sólo le falta confirmarlo en Roland Garros. Por el momento nadie ha podido con él en pistas de tierra. En lo que llevamos de año no ha perdido ni un solo partido en esta superficie, ha ganado 28 consecutivamente y eso le ha convertido en campeón 5 veces: México, Estoril, Barcelona, Montecarlo y Roma. Una trayectoria impecable hacia el examen de París, dentro de una semana.

Muster sigue siendo la bestia negra de Sergi. Hasta ahora le ha ganado 3 veces de las 11 en que se han enfrentado. Su mentalidad se condiciona cuando juega contra el austríaco. Y ese es un problema que empieza a afectar a la mayoría de tenistas del circuito. Sin embargo, ayer Bruguera sólo bajó la guardia una vez, en la tercera manga, cuando acababa de perder la muerte súbita del segundo set. Muster no perdonó. Agudizó su espíritu, buscó las líneas, abrió unos ángulos increíbles y sólo permitió a Sergi ganar dos juegos.

Cuando el catalán intentó entrar de nuevo en el partido en la cuarta manga ya era demasiado tarde. Muster prosiguió su inspiradísima racha de golpes ganadores y Bruguera acabó por rendirse, ante la evidencia de que su condición física -la lesión que le afectó a las dos rodillas condicionó toda su temporada- era inferior a la de Muster.

Sin embargo, tanto Bruguera como el austriaco demostraron que ya están a punto para afrontar el torneo de Roland Garros. Sergi tuvo su punto de inflexión de la temporada hace dos semanas en Hamburgo, donde se impuso al norteamericano Andre Agassi, número uno mundial, en cuartos de final. Allí le eliminó el croata Goran Ivanisevic. En Roma se redimió de aquella derrota. Pero Muster le cortó el paso. A estas alturas es evidente que estos dos jugadores serán los hombres que batir en el único Grand Slam que se disputa sobre tierra batida.

Muster recibió un cheque de 35 millones de pesetas por su triunfo. Bruguera cobró 18.