Los sindicatos europeos se proponen lograr la semana laboral de cuatro días y la jornada de 32 horas

Los sindicatos europeos creen que el crecimiento económico no resuelve por sí solo la dramática dimensión del paro, que afecta a 20 millones de ciudadanos y margina a 50 millones de europeos por debajo del umbral de la pobreza. Piensan que hacen falta muchas políticas combinadas y una de ellas es el reparto del trabajo existente. Por ello, la Confederación Europea de Sindicatos (CES) aprobó ayer en su VM Congreso que la jornada de 35 horas semanales será su "elemento movilizador" para los próximos años. Incluso se han propuesto un objetivo más ambicioso: lograr la jornada de 32 horas, la semana laboral de cuatro días y la jubilación progresiva, junto con políticas de creación de empleo.

ENVIADA ESPECIAL, El VIII Congreso de la CES, que se está celebrando en Bruselas, se ha comprometido a llevar a cabo una campaña europea de reducción generalizada de la jornada laboral individual y colectiva y de reforma del tiempo de trabajo mediante la vía de la negociación y en el marco de una estrategia de crecimiento generador de empleo, que considera sigue siendo necesario. Ese claro compromiso se recoge en el documento Situar el empleo y la solidaridad en el corazón de Europa, presentado ayer por Emilio Gabaglio, secretario general de la CES, y respaldado por los 45 sindicatos de 23 países de la Europa occidental que conforma la confederación y suman un total de más de 47 millones de trabaJadores afiliados.Esa propuesta de recortar la jornada laboral tan sólo ha encontrado algunas reservas de los representantes de los sindicatos noruegos, que han argumentado que la reducción de jornada no siempre genera empleo. Pese a esas reticencias, el documento aprobado por el congreso afirma explícitamente que los acuerdos ya logrados en empresas con dificultades sobre rebaja del tiempo de trabajo han permitido evitar o reducir los despidos colectivos.

La resolución no se pronuncia sobre si la reducción de jornada debe ir acompañada de recorte salarial. Es un debate que queda pendiente para el futuro. Lo que sí concreta es que, con la menor jornada, "los agentes sociales tendrían la posibilidad de repartir los beneficios de la productividad entre la reducción del tiempo de trabajo, los salarios y las inversiones".

Los sindicatos españoles que forman parte de la CES -UGT, CC 00 y ELASTV- respaldan sin fisuras esas políticas. El secretario general del sindicato vasco ELASTV, José Elorrieta, opina que la reordenación de la jornada laboral es una parte importante de "la ofensiva para crear empleo" y que el reparto del tiempo de trabajo supone "dar nuevas oportunidades al empleo sin olvidar una mejor distribución de los beneficios generados por los aumentos de productividad", que a su juicio es la fórmula mejor "para romper el simplismo que vincula la reducción de jornada y el recorte del salario".

Más poder a la CES

El secretario general de UGT, Cándido Méndez, en su intervención ante el congreso, reafirmó también la voluntad de su sindicato de "abordar resueltamente la reordenación del tiempo de trabajo. Las 35 horas semanales deben ser una realidad en la UE para finales de siglo y éste es un gran eje de movilización sindical". El dirigente abordó otro de los grandes retos que tiene la CES, que es su fortalecimiento para poder desarrollar un auténtico contrato social con los responsables comunitarios.El líder de CC OO, Antonio Gutiérrez, que también intervino ante el plenario, está convencido de la necesidad de que la CES reciba poderes mucho más amplios de los sindicatos nacionales y para ello se deben vencer las resistencias de los sindicatos nórdicos y británicos y, en menor medida, de los alemanes. El máximo responsable de CC OO afirmó:"Tenemos que demostrar nuestra capacidad de administrar nuestra fuerza para una acción sindical más eficaz y así superar el círculo vicioso en que nos quieren situar los gobiernos, la patronal y la Comisión Europea".