El FBI detiene en Misuri a otros dos sospechosos del atentado de Oklahoma

El cerco sobre los responsables del atentado terrorista de Oklahoma se va estrechando. El FBI ha detenido a otras dos personas relacionadas con la explosión, aunque todavía no han sido directamente acusadas de participar en el aten tado. Gary Land y Robert Jacks fueron detenidos ayer por la mañana en un motel de Cartaghe (Misuri), a unos 300 kilómetros al noreste de Oklahoma. De los escombros del edificio se han rescatado o localizado ya 146 cadáveres, y menos de unía veintena se dan por desaparecidos.Un policía de tráfico del Estado de Misuri había detectado un Ford Thunderbird blanco con una matrícula de Arizona que se encontraba en la lista de vehículos buscados en la operación de caza y captura. El FBI también había facilitado sus nombres el lunes, junto a un aviso de alerta sobre su paradero.

Land y Jacks, contó después la propietaria del motel Kel-Lake, se registraron con sus nombres y mantuvieron un comportamiento normal. Lo único que quisieron saber era el número de los canales de cable de la televisión.

Después del aviso de la policía local, agentes del FBI rodearon el motel el lunes por la noche y detuvieron a los (los sospechosos a las 6.45 horas de ayer sin que ofrecieran resistencia. Por el momento, se les considera posibles testigos. Janet Reno, la responsable de Justicia, no ofreció ningún dato al comunicar la detención, excepto que los dos estaban cooperando con las autoridades y que tenían información sobre el atentado.

El FBI dijo que tanto Land como Jacks pasaron la noche del 18 al 19 de abril (la noche anterior a la explosión) en un motel de Oklahorna y que los dos coincidieron el pasado año en Arizona con Timolhy McVeigh, por el momento el único directamente relacionado con la explosión.

Uno de los dos detenidos, de ayer, Gary Land, tiene además cierto parecido físico con el segundo sospechoso de haber conducido hasta el edificio Alfred Murrah la camioneta cargada de explosivos. El FBI facilitó el lunes un tercer retrato robot en el que se le dibuja de perfil.

En el edificio, abandonadas ya todas las esperanzas de encontrar con vida a víctimas de la explosión, se ha empezado a utilizar material pesado -grúas y excavadoras- para acelerar el desescombro. Entre rescatados y localizados, los muertos ascendían ayer a 146. El último ajuste de cifras estimaba que hay entre 15 y 20 desaparecidos, según Gary Marrs, jefe de bomberos de Oklahoma.

Algunos de los que todavía siguen en situación de desaparecidos quizá no puedan ser rescatados nunca. En su recuerdo y en conmemoración de todas las víctimas del atentado que cambió para siempre la vida de la ciudad, los habitantes de Oklahoma, al tiempo que recuperan la normalidad, empiezan a debatir el destino que se dará al solar. Una de las sugerencias más extendidas es la de construir un parque con alguna escultura que recuerde momentos clave de la tragedia del 19 de abril, como la foto que dio la vuelta al mundo y que reflejaba el esfuerzo de un bombero y un policía por salvar la vida de uno de los niños golpeados por la explosión.