Alzo la voz contra el peligro de callar
El escritor Juan Ramón Jiménez, el músico Pau Casals, el poeta Pedro Salinas, así como Carlos López Marichal, Santiago Iglesias Pantín y otros muchos españoles, encontraron en el calor de Puerto Rico su hogar.Los puertorriqueños aprendimos en la convivencia el amor a España. Históricamente, mantenemos el castellano a la hora de rezar, cantar y sentir. Aún más, hemos superado el dolor de la conquista.
Hace 20 años dejé también mi tierra para ahondar más en la cultura hispánica. Tengo dos hijos españoles, y hoy necesito alzar la voz para dar las gracias a España en un momento en el que, me da la impresión de que sus hijos han olvidado hacerlo e injustamente se maltratan quejándose continuamente de cuanto les rodea.
Escribo esta carta desde la clínica Puerta de Hierro de Madrid, donde tengo a un familiar ingresado desde hace más de 19 días. He comprobado la constante eficiencia y profesionalidad del personal de este centro, incluso en fechas festivas, y así lo quiero hacer constar. La Seguridad Social funciona, señores, como funcionan otras muchas cosas de este país. Lo digo teniendo la experiencia de haber vivido en el extranjero y con la posibilidad que ello me ofrece para poder comparar.
Sólo me parece peligroso callar. Los pueblos sin conciencia de lo bueno que tienen pierden mucho o al menos no dejan a sus hijos el legado de conocerse justamente de ser agradecidos. El desánimo es peor enfermedad. Para tirar hacia delante se necesita, ser positivo.
Gracias especialmente al equipo de traumatología, a las enfermeras de la unidad de cuidados intensivos y a las de la primera planta de la residencia, a las asistentes sociales y a todo el personal que hace posible que la clínica Puerta de Hierro marche tan bien como lo hace.
Ojalá reciban otras muchas cartas de reconocimiento y estímulo.-