Cartelera en ebullición
Está Madrid que arde con una programación músico-festera. En medio de tal despliegue, fue una mera coincidencia temporal que se colase un semiolvidado Paul Di'Anno. Notable del heavy metal de 15 años atrás, cuando ponía su voz al servicio de Iron Maiden, el vocalista ha ido dando tumbos y palos de ciego desde que perdió tal condición. El último de los cuales le ha llevado a una introducción urgente en los sonidos en boga que resulta como mínimo sospechosa. Al concierto acudió este comentarista y dos decenas más de aficionados. En la Universal Sur de Leganés, donde caben 2.OOD espectadores, fue desolador.En el combativo escenario de Revólver, el comando granadino de Lagartija Nick se lanzó a tumba abierta en pos del objetivo siempre confesado: no dar tregua. Y así fue: rock afilado y simple, pero a la vez eficaz e inteligente, que disfrutó de sonido claro. Los andaluces se explayaron a gusto y fue de agradecer el honesto comentario final de Antonio Arias, el fundador de la banda, que dio a entender sin reservas que quien no aguantaba más tralla era él mismo.
En Canciller, Boicot, grupo madrileño que asume influencias del punk junto a las relativas al rock radical, es de los que prefiere, tomarse esto como un entretenimiento. Pero difícil se hace el disfrute cuando el sonido es una caja de truenos como fue el caso. En la misma noche, cita en Revólver para el encuentro con Tribu X, investigadores del terreno intermedio entre el funk y el rock. Estos muchachos saben lo que se traen entre manos, aunque las dificultades para que un nuevo grupo español se consolide son, hoy por hoy, monumentales.
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