UGT y CCOO centrarán el Primero de Mayo en la lucha contra el paro

Los líderes de UGT y CC OO, Cándido Méndez y Antonio Gutiérrez, respectivamente, asengurarón ayer que el Primero de Mayo será una jornada "reivindicativa frente al Gobierno y frente a las patronales", centrada en la lucha contra el paro y la degradación del empleo, y en la exigencia de un cambio de política económica que potencie la protección social, los servicios y las industrias estratégicas del sector público.

, Las dos centrales quieren también Convencer a los trabajadores para que se afilien, porque "la principal garantía de sus derechos individuales y colectivos" está, según ellos, antes en los sindicatos que en las leyes. Méndez y Gutiérrez negaron, sin embargo, que la cuestión de la afiliación vaya a ser el motivo central de la jornada, y aseguraron que sus dos organizaciones siguen creciendo "de forma sostenida, aunque insatisfactoria"."Con el acueducto de cuatro días y pico", admitió Gutiérrez, "es posible que muchos trabajadores se vayan de puente, pero espero que lo hagan después de la manifestación". Méndez se mostró confiado en que las convocatorias tendrán una respuesta masiva.

El manifiesto conjunto de las dos centrales plantea la exigencia de una "política de crecimiento cualitativo", que no esté basada en la reducción de plantillas y la degradación del empleo. "La derecha pretende abaratar el despido", dijo Méndez, "y combatiremos esa pretensión sin vacilación". Los sindicatos reivindican el mantenimiento del sistema público de protección social y se oponen a las privatizaciones "masivas e indiscriminadas". Un modelo basado exclusivamente en la lógica de mercado sería, en palabras de Méndez, "socialmente inaceptable".

Por otra parte, el obispo de Vic, Josep Maria Guix, propuso ayer repartir el trabajo "porque es un bien escaso", y advirtió que "la crispación y el mal humor de los ciudadanos" puede convertir en reivindicativa la jornada festiva del Primero de Mayo y "generar enfrentamientos con violencia fisica".