Los vándalos regresan a los autobuses de Alcorcón

Tres lunas rotas ha sido el resultado de los últimos actos vandálicos que han sufrido los autobuses de la empresa De Blas, que une Alcorcón y Móstoles (144.850 y 199.000 habitantes, respectivamente) con Madrid. Estos incidentes se producen dentro de la huelga que los conductores de las populares blasas realizan desde octubre del año pasado. Los paros consisten en no prestar servicio de vuelta a Madrid las noches de los fines de semana en las líneas que cubren la zona de discotecas de Costa Polvoranca.

El primero de estos últimos incidentes se produjo a las diez de la noche del pasado sábado en el autobús 176 de la línea 520, Alcorcón-Móstoles. El cristal de una puerta del vehículo fue roto en Mostoles en la parada que hay junto a la discoteca Dedo's. La siguiente rotura se produjo, ya el domingo a las 6.30, en el Alto de Extremadura. Unos jóvenes que provenían de Costa Polvoranca lanzaron, una vez fuera del autobús 232 de la línea 512, Madrid-Alcorcón, una piedra y rompieron una luna lateral. Otra luna fue la que se encontró hecha añicos el conductor del autobús 205 de la línea 518, Villaviciosa de Odón-Madrid, ayer domingo al recoger el vehículo.