Antonio di Pietro: ni zorra, ni león

Quien nace policía o juez o cura no debería cambiarse el traje, porque cualquiera ve que no le sienta bien. (...) Así es Antonio di Pietro. (...) Todos se preguntan de parte de qué política está. Está, según parece, de la suya, la del hombre honesto y generoso que espera que los italianos como él lo sigan. (...))Durante la reunión en la que Di Pietro anunció su salida definitiva de la magistratura hubo un episodio significativo de la dura prueba a la que el juez está siendo sometido: decenas de fotógrafos lo ametrallaron como no se había visto jamás. (...) Quizás debería darse cuenta de que su vicisitud es de las que escapan al sentido común. Cuando era juez se quejaba de que políticos de todos los colores intentaban tirar de él. Pero ahora es peor, ahora cualquier palabra que pronuncia (...) se convierte en titular de prensa, como si los medios lo utilizaran para llenar el vacío político. (...)

Hay algo de evangélico en esta historia, no en el sentido de la caridad y el amor, sino de los hombres de poder que siguen a Cristo, ya cantando el Hosanna, ya maldiciendo. Di Pietro es un hombre honesto y generoso, pero no se quiere que corra la suerte que Maquiavelo reservaba a los hombres buenos que no han entendido que la política se ha hecho para aquellos que tienen la naturaleza de "la zorra o la del león": la astucia de la zorra, la fuerza feroz del león.

5 de abril