Pujol pide mayor diferenciación entre regiones y nacionalidades y que se refleje en el Senado

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, expondrá en su próxima comparecencia ante el Senado que la reforma en marcha de la Cámara alta debe hacerse "dando contenido" a la "doble composición" de España entre regiones y nacionalidades, un eufemismo de naciones, agregó, "que no engaña a nadie". El anuncio lo formuló ayer en el Parlament durante la conmemoración del 15º aniversario del autogobierno, catalán.

La propuesta de esa "doble composición" del nuevo Senado aún no está articulada, señalaron fuentes nacionalistas, pero iría por el camino de vincular el número de senadores al nivel de competencias asumidas por las comunidades autónomas.Pujol comparecerá el próximo 7 de abril en el Senado, cerrando el turno de comparecencias de los presidentes autonómicos para opinar sobre la reforma de la Cámara Alta que debe convertirla en una cámara de representación territorial, lo que requiere una modificación de la Constitución. La filosofía que impregna la propuesta del presidente catalán es no desaprovechar la ocasión para romper con la política del "café para todos".

Durante su intervención en el Senado en septiembre pasado, Pujol ya explicó que la generalización autonómica no debe ser sinónimo de homogeneidad. Por el contrarío, debería incorporar un grado considerable de heterogeneidad: "Los catalanes hemos creído siempre que hay que tener en cuenta que en España hay algunas entidades históricas y territoriales -no sólo Cataluña- con una personalidad muy propia que no pueden quedar encajadas en un solo y único modelo de autonomía", dijo entonces. "Es inútil y pernicioso querer ignorar la realidad", agregó.

El Parlament celebró ayer un pleno extraordinario para conmemorar los 15 años de autogobierno. Pujol cerró el turno de intervenciones con un parlamento en el que, sin ocultar las dificultades que acarrea la construcción del Estado de las autonomías -"una larga y a veces extenuante batalla", dijo-, dibujó un panorama optimista: "Quien mire hacia atrás no dejará de reconocer que en estos 15 años el cambio que ha experimentado Cataluña ha sido muy importante y muy positivo".

El optimismo no fue óbice para que Pujol hiciera hincapié en la pervivencia de "dificultades serias" para lograr de la Administración central una "interpretación más positiva" del Estatuto de Autonomía: "A veces existe una intencionalidad política. Otras veces es por inercia, o por una oposición atávica, un recelo u oposición a ciertos planteamientos para que Cataluña sea reconocida en plenitud. A veces nos encontramos con la fácil aceptación por otras comunidades autónomas de planteamientos que suponen una rebaja".

Pero también destacó avances en el reconocimiento del Estado plurinacional, plurilingüe y pluricultural. El retorno desde Salamanca de los archivos de la Generalitat republicana, "expoliados por derecho de conquista", es una buena noticia, aunque ha costado "Dios y ayuda". La reciente sentencia del Tribunal Constitucional que afirma que el centro de gravedad de la ensenanza en Cataluña ha de ser la lengua catalana, es otra de las buenas noticias que destacó.Ataques del PP

El presidente del Partido Popular en Cataluña, Aleix Vidal-Quadras, rompió el tono institucional utilizado por los demás intervinientes en la conmemoración del autogobierno con un discurso duro que bordeó la descalificación de Pujol y su gente. Una intervención acogida con rumores desaprobadores desde los bancos de la mayoría y con preocupación y malestar expresados en privado por algunos diputados del PP.

Vidal-Quadras parecía querer romper con la imagen de entendimiento entre su partido y los nacionalistas catalanes difundida tras su larga entrevista personal con Pujol.

El presidente del PP se refirió irónicamente en un par de ocasiones a la "pax pujoliana" para referirse a los 15 años de autogobierno y lanzó una retahíla de preguntas cargadas de dinamita. Unas preguntas que Vidal-Quadras dejó sin respuesta "por cortesía a un presidente que hoy celebra su 15 aniversario como tal" y "para no dejar al Gobierno [catalán] sin aliento a la hora de soplar las 15 velas" de un supuesto pastel de aniversario.