El dólar se recupera y la peseta se mantiene a pesar de que el Bundesbank no toca los tipos

El Bundesbank (banco central alemán) decidió ayer no cambiar sus tipos de interés directores, que permanecen invariables en 4,5% el de descuento y el 6% el lombardo desde el pasado 13 de mayo. El dólar recibió la noticia con una rápida caída, aunque también momentánea. Tras una jornada movida, pero no tensa, el billete verde recuperó terreno frente al marco apoyado por la subida de precios de la deuda estadounidense. En su camino, tanto de subida como de bajada frente a la divisa alemana, fue acompañado por las demás monedas. Cerró en el mercado europeo a 1,3964 marcos y a 90,15 yenes. La peseta cerró prácticamente como la víspera, a 92,10 con el marco, y la deuda y la bolsa subieron.

Nada parece conmover a los celosos guardianes de la estabilidad económica alemana: ni las peticiones de los otros países en la cuerda floja monetaria, ni las de la propia industria exportadora deseosa de un marco más asequible para vender el made in Germany en el extranjero. Los directores del Bundesbank están convencidos de que su tarea primordial es conservar la estabilidad de la economía alemana y no hacer favores a las monedas de los otros países, a los que se considera culpables de los desarreglos monetarios propios. La exportación es muy importante, pero la inflación lo es todavía más para los señores del Bundesbank, que ven con preocupación los acuerdos salariales que se están pactando en la negociación colectiva.La masa monetaria controlada, el índice de precios al consumo con tendencia hacia el 2%, frente al 3% del año pasado, y la subida del marco hasta unas alturas que empiezan a preocupar, porque pone en peligro las exportaciones, habían alimentado la esperanza de que el Bundesbank disponía de un margen de maniobra para bajar ayer los tipos de interés. Incluso el presidente del Bundesbank, Hans Tietmeyer, parecía haberlo insinuado así en una entrevista con un periódico británico. Pero nada de eso ocurrió ante los temores del banco central a un incremento futuro de la inflación.

Automática respuesta

La respuesta de los mercados se produjo de forma casi automática. Durante toda la mañana habían mantenido una tensa calma, con ligeras depreciaciones, y la atención puesta en Alemania. Conocida la decisión del Bundesbank, el dólar cayó algo por debajo de 1,38 marcos y la peseta se situó a 92,4 unidades contra la divisa alemana. El franco también se depreció y la libra esterlina alcanzó una nuevo mínimo al situarse por debajo de los 2,2155 marcos. La lira, por su parte, tenía varios puntos de mira. La decisión del Bundesbank la arrastró hasta las 1.225 unidades por marco, pero luego la aprobación en el Parlamento del plan de Dini hizo que se recuperara, si bien el estrecho margen con que se aprobó el proyecto del primer ministro italiano no elimina muchas incertidumbres.Lo que se temía podía haber acabado como el rosario de la aurora, con un dólar de nuevo extremadamente débil y las monedas europeas experimentando fuertes caídas contra el marco, sin embargo, no ocurrió. Y en lo que los analistas llaman "un movimiento técnico" la situación dió la vuelta. Según Antonio Zamora, de Analistas Financieros Internacionales, las causas para que las monedas se recuperaran fueron varias. En primer lugar, influyó el hecho de que el dólar no bajara mucho más allá del entorno 1,38 marcos. Después influyeron los rumores de intervención de bancos centrales en apoyo del billete verde y, por último, influyó la subida de precios de la deuda americana, impulsada por nuevos datos de coyuntura, que también favoreció al dólar.

Finalmente, en una jornada volátil, movida, pero no tensa, las monedas recuperaron terreno. Y también lo hicieron las bolsas y la deuda. Al cierre del mercado europeo el dólar cotizaba a 1,3964 marcos (1,3185 la víspera) y 90,15 yenes frente a 89,50 el día anterior. La peseta cerró prácticamente igual que la víspera, a 92, 10 unidades por marco (92,12 el miércoles) y perdió con el dólar al cerrar a 128,45 pesetas (127,65 la víspera). El_ franco cerró a 3,5630 frente a 3,5591 el miércoles, la libra a 2,2170 marcos y la lira se depreció un poco y acabó a 1.212,75 frente a 1.211,69 unidades por marco del día anterior.

Se amplía el diferencial

La deuda subió, animada por la recuperación de precios en Estados Unidos. En España la rentabilidad se situó en el 12,30% (12,37% el miércoles) pero, al subir menos el precio que el de la deuda alemana, el diferencial de tipos se amplió hasta 5,15 puntos.La jornada en las bolsas fue también muy volátil. La española terminó subiendo un 0,75% después de haber registrado un nuevo mínimo anual a lo largo de la mañana, cuando el índice general perdía un 1,20%. Al cierre de la sesión, informa Rafael Vidal, el índice se situó en el 269,65%. Francfort quedó descolgado de los avances del resto de las plazas europeas, al terminar la sesión con un recorte del 0,90%. París subió el 2,71% y Londres el 1,50%.

Según los analistas, es posible que los mercados vivan cierta calma las próximas jornadas, tras la reacción de ayer, pero aun viven inmersos en medio de una fuerte inestabilidad.