Pujol transmite a propios y extraños que no va a cambiar de política

C. P. Jordi Pujol está decidido a mantener su apoyo al Gobierno de Felipe González al menos este ano, sin que la nueva ofensiva de la oposición a lomos del caso Roldán le quite el sueño. Esta es la impresión que sacó ayer el presidente del PP de Cataluña, Aleix Vidal-Quadras, tras una entrevista de casi dos horas con el líder nacionalista.

Vidal-Quadras le expresó a Pujol su preocupación porque la crisis de la peseta llegara a afectar a la economía catalana, que por su carácter industrial es muy sensible a los altibajos. Pero el presidente de la Generalitat se manifestó "más optimista", en palabras del dirigente popular, y sigue creyendo que el apoyo al PSOE garantiza la recuperación económica. "Es su tesis, que no compartimos pero respetamos", declaró Vidal-Quadras.

Fuentes nacionalistas atribuyen las dudas expresadas los últimos días por dirigentes de CiU a la presión ambiental a que se ven sometidos los diputados de la coalición en el Congreso. Pujol, que no estuvo presente en la reunión del ejecutivo de Convergéncia del lunes, donde se expresaron públicamente esas dudas, ha hecho llegar al grupo parlamentario el mensaje' de que deben mantener la serenidad y el rumbo marcado.

El líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, tradicionalmente más cauteloso con el respaldo al PSOE, se ratificó en el apoyo crítico al Gobierno durante 1995 en una entrevista en el circuito catalán de TVE, anteanoche. Antes de acudir a televisión Duran se reunió con Pujol, quien le transmitió un mensaje de optimismo, a la luz del crecimiento económico del país.

Siguiendo ese mismo patrón, Joaquim Molins, portavoz parlamentario de CiU, declaró ayer en Madrid que "ni la situación de la peseta ni los últimos acontecimientos relacionados con el caso Roldán "han puesto en cuestión, en absoluto, el apoyo dé la coalición" al Gobierno.