Clases con recibí

Diversos jueces y fiscales, en algunos casos pertenecientes a la Audiencia Nacional, han confirmado que percibieron pagos del Ministerio del Interior por dar clases a policías y guardias civiles en dependencias de dicho departamento. Entre ellos se encuentra Eduardo Fungairiño, teniente fiscal de la Audiencia Nacional.Fungairiño señala que la periodicidad de tales conferencias fue de una cada dos meses, por un monto aproximado de 30.000 pesetas por cada una. Según los casos, el pago se hacía en metálico contra recibí, por cheque o por transferencia. Niega tajantemente que se tratara de gratificaciones, y asegura que siempre declaró a Hacienda su percepción. Como el resto de los consultados, precisa que no sabe si el dinero procedía o no de los fondos reservados, frente a lo que apuntan fuentes conocedoras de tales pagos.

También Miguel Moreiras, juez de la Audiencia Nacional especializado en delitos monetarios, asume haber cobrado de Interior por dar clases a policías y guardias desde 1992. En el caso de Moreiras, las charlas en cursos de formación de funcionarios se pagaron a unas 250.000 pesetas por curso, con una periodicidad que, según explica, no era mensual.

"Todas las cantidades que he recibido lo han sido mediante la firma de un recibo, nunca hubiera cogido una cantidad en negro ", asegura el juez, quien añade que, "si la procedencia del dinero era de fondos reservados, lo ignoro en absoluto, pero no lo creo desde el momento en que se me pagaban ordinariamente, y, desde luego, firmaba un recibo".

Estudios judiciales

Por otro lado, el Centro de Estudios Judiciales, dependiente de Justicia, se financió con fondos reservados en lo que se refiere a la formación de policía judicial durante 1987 y 1988 -hasta julio-, según reconoce su antiguo responsable, Carlos García Valdés.

La decena larga de jueces, fiscales -algunos pertenecientes a la Audiencia Nacional- y abogados que desfilaron por sus dependencias cobraron en metálico y contra un recibí por las conferencias que dieron para formar agentes de policía judicial en nueve cursos.

García Valdés resalta que los profesores no fueron advertidos sobre el origen opaco del dinero, y añade que los cursos se sufragaron con fondos reservados de Interior hasta que Justicia habilitó una partida presupuestaria en septiembre de 1988. En total, se abonaron unos 12 millones de pesetas a los conferenciantes en esos años con dinero de la Secretaría de Estado para la Seguridad.

Algunos conferenciantes llegaron a cobrar en dicho periodo más de 400.000 pesetas de dinero opaco, según ha comprobado EL PAÍS. El pago por charla oscilaba entre 30.000 y 180.000 pesetas.