La guerra atrajo a El Salvador más dinero que la paz, según Calderon

"La guerra atrajo más dinero que la paz", se lamenta el presidente de El Salvador, Armando Calderón Sol, que pide a la comunidad' internacional 18.000 millones de pesetas para acometer los programas de reinserción mediante indemnizaciones y entrega de tierras previstos por los acuerdos de paz que hace tres años pusieron fin a la contienda civil. Calderón recibió a EL PAÍS al margen de la visita que efectuó a El Salvador el presidente Felipe González.Calderón, de 46 años, fue elegido jefe del Estado en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales del año pasado. Era el candidato de la conservadora Alianza Republicana Nacionalista (Arena) y derrotó a Rubén Zamora, su adversario del Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional (FMLN).

Calderón recuerda orgulloso que una delegación conjunta del Gobierno y de la oposición del FMLN ha estado en Washington y en Europa para solicitar las ayudas. "Es lamentable que hubiese más dinero para la guerra que para la paz, pero El Salvador fue uno de los últimos coletazos de la guerra fría, y para algunas potencias valía la pena invertir por un bando", dice.

El 30 de abril expira el mandato de ONUSAL, la misión de la ONU encargada de vigilar el cumplimiento de los acuerdos de paz, y Calderón revela que ha pedido al secretario general de la ONU, Butros Butros-Gali, que "se mantenga una ventanilla abierta".

Las Fuerzas Armadas "han entendido el papel que les toca jugar en dernocracia", asegura el presidente, "y están dando un ejemplo a algunos ejércitos de América Latina. No lo diría si no lo constatara así. No soy monigote de nadie".

Peligrosa delincuencia

La delincuencia común, reconoce Calderón, está en pleno auge, hasta el punto de que si continúa aumentando "puede poner en peligro el proceso democrático, porque los ciudadanos tienden a tomarse la justicia por su mano". Confía, sin embargo, en que se trate de "un fenómeno coyuntural".

En el plano económico, Calderón teme "las repercusiones que sobre las inversiones privadas en El Salvador" puede tener la crisis mexicana. Espera,. no obstante, poder sacar adelante su plan de ajuste económico, que establece una paridad fija entre el colón y el dólar.

Calderón no tiene, por último, la intención de establecer relaciones diplomáticas con Cuba, a pesar de que una delegación parlamentaria salvadoreña haya visitado recientemente la isla. "Hemos sido víctimas del expansionismo cubano", declara para justificar su decisión.

[El Gobierno advirtió ayer a los ex militares que el martes protagonizaron desórdenes en las inmediaciones de la Casa Presidencial que aplicará con rigor las leyes, y consideró las protestas como parte de un plan desestabilizador del país, informa Efe.]