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El Arzobispado impone condiciones para incluir los Jerónimos en la reforma del Museo del Prado

El templo financia el descubrimiento de los elementos góticos, recién comenzado

Sí, pero. El arzobispo de Madrid, Antonio Rouco, supedita la inclusión de la iglesia de San Jerónimo el Real en la amplia reforma proyectada para el Museo del Prado a que se hagan obras de restauración en el templo o de reconstrucción en el claustro, ahora abandonado, y a que el recinto no pierda el carácter religioso. Así se lo ha hecho saber por carta a la ministra de Cultura, Carmen Alborch. Por otra parte, ya han comenzado en el interior de la iglesia las tareas para descubrir los elementos góticos. Los trabajos corren a cuenta de la parroquia. No habrá bodas hasta junio.

En una misiva con fecha del pasado 21 de diciembre, monseñor Rouco señala dos condiciones irrenunciables para que el conjunto monumental de San Jerónimo el Real (vulgo, los Jerónimos). "pudiese ser tenido en cuenta en un concurso internacional de ideas con vistas a la ampliación del Museo del Prado", edificio vecino al templo.El primer requisito episcopal señala que el conjunto arquitectónico eclesiástico "no debe ser afectado por las ideas o proyectos que se propongan para la prevista ampliación, excepto para su restauración o para la reconstrucción del claustro, de forma que se dé al conjunto la dignidad arquitéctónica, artística y urbanística que requieren tanto su carácter de iglesia emblemática de la ciudad como el entorno noble en que está situada".

Rouco plantea una segunda condición: "Las ideas o proyectos que se presenten no han de mermar o dificultar el uso del mencionado conjunto para atención de las necesidades religiosas y pastorales de los. fieles de la parroquia"'.

"Salvadas estas dos condiciones, a las que no nos es posible renunciar, y la no consideración de las cuales, según me dicen, crearía en Madrid un considerable malestar social, estamos plenamente abiertos a la colaboración y a que se puedan considerar cualesquiera posibilidades que las respeten", finaliza la carta de Rouco a Alborch.

El arzobispo ha dado a conocer sus condiciones restrictivas al Ministerio de Cultura, antes de que éste presente, presumiblemente el próximo febrero, las bases definitivas del concurso dé ideas para la ampliación de la principal pinacoteca española. "Si los Jerónimos no se pudiera incluir, el proyecto quedaría lesionado en su volumetría", apunta el responsable de las bases, Antonio Fernández Alba.

Según el adelanto de las bases, dadas las "particulares características urbanísticas de la zona", los proyectos concursantes deberían permitir. "relacionar" los edificios del Museo del Prado (pabellón Juan de Villanueva y Casón del Buen Retiro), Museo del Ejército (en el que está prevista una próxima ampliación de la pinacoteca) y "el nuevo edificio a construir en el claustro de los Jerónimos". Algunos expertos han propuesto que la relación entre edificios se haga mediante un paso subterráneo.

En ese documento se señala una propuesta de nuevo edificio "fundamentalmente subterráneo colindante con la iglesia de los Jerónimos" y otra para el "edificio de nueva volumetría" en el claustro. Levantado a comienzos del siglo XVII, se encuentra en un estado lamentable. Del piso alto sólo quedan las arcadas al aire. El patio, que ha perdido buena parte de las losetas, ofrece un aspecto abandonado. Los cubos de basura son sus moradores más recientes.

Obras y negociación

En el Prado señalaron ayer que desconocen las condiciones planteadas por el arzobispo de Madrid. Reconocieron que para hacer edificaciones o pasos subterráneos en el terreno de los Jerónimos necesitan el preceptivo permiso de la Iglesia. Por su parte, el presidente del patronato de la pinacoteca, José Antonio Fernández Ordóñez, señaló que Cultura y el Arzobispado. están negociando. Fuentes del ministerio indicaron que la ministra Carmen Alborch ha solicitado una entrevista con el arzobispo a la que acudiría acompañada de miembros del patronato del Prado.

Al margen de la polémica, los Jerónimos estrena obras esta semana para descubrir los elementos góticos originales de hace casi 500 años (pilastras. y nervios), hasta ahora enfoscados. Esta actuación en el interior durará hasta finales de mayo. Hasta entonces, el culto se celebrará en el salón parroquial. El párroco del templo, Manuel González Cano, señala que él presupuesto de los trabajos es de 80 millones de pesetas. Una fundación próxima a la parroquia le ha prestado la mayor parte del dinero. Se ha abierto una cuenta corriente para recaudar fondos: 060/ 00193/80, del Banco Popular (sucursal 5l).

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