Vera iniciará acciones judiciales contra Domínguez y Amedo, por acusarle de pagar 200 millones con fondos reservados

Rafael Vera, ex secretario de Estado para la Seguridad, anunció ayer que iniciará acciones judiciales contra José Amedo y Michel Domínguez. Ambos, en sus confesiones a El Mundo, le identificaron como la persona que ofreció y entregó a sus esposas 200 millones de pesetas de los fondos reservados, como compensación por los perjuicios causados por la investigación judicial de los GAL. Los ex policías acusan al secretario de Vera, Juan de Justo de trasladar a Ginebra (Suiza) 50 millones para entregárselos a Marian y a Alicia, esposas de los ex agentes. De Justo fue encarcelado anoche.Los ex agentes también dijeron que José Luis Corcuera, entonces ministro del Interior, conocía y autorizaba la operación. Las reacciones no se hicieron esperar. Las más duras, las de IU, que por boca de su diputado Felipe Alcaraz llegó a acusar a Felipe González de estar detrás de la trama de los GAL. El folletón, cuya publicación inició ayer el diario madrileño -se anuncian otras cuatro entregas- y en el que se señala a Vera como la persona que dio orden de ingresar los 200 millones en dos cuentas en Suiza, desató una tormenta de declaraciones.

Vera, en varias declaraciones radiofónicas, negó ayer la veracidad de las acusaciones y afirmó que efectivamente, había hablado en varias ocasiones con las esposas de sus acusadores, en lo que señaló que era una actividad normal como responsable de unos funcionarios con problemas y para interesarse por su situación personal. Pero añadió que no había dado ninguna instrucción de pago.

El ex secretario de Estado se preguntó ayer a quién puede interesar el cambio de actitud de Amedo y Domínguez, que del silencio han pasado a la locuacidad, y a qué intereses responde, y dijo que cree que las acusaciones forman parte de una campaña cuyo objetivo no es "ni el señor Corcuera ni el señor Barrionuevo, sino González".

Pero si Vera negaba veracidad a lo publicado ayer por El Mundo, no ocurrió lo mismo en las filas de IU. El diputado por Málaga, Antonio Romero, dio a las declaraciones de los policías arrepentidos la categoría de confirmación de "que el Gobierno, con dinero de los fondos reservados, quiso borrar las huellas de los GAL". Y si González estuvo o no detrás de la organización terrorista tampoco ofrecía ayer duda alguna para Felipe Alcaraz, diputado de IU por Sevilla, que acusó -"sin duda"- a Felipe González de ser la X (máximo dirigente de los GAL) que en su día marcó en el sumario el juez Garzón.