Delegaciones de Rusia y Chechenia buscan el acuerdo con un diálogo de sordos

ENVIADA ESPECIAL, Vladikavkaz¿"Cuándo han estado ustedes por última vez en Chechenia?", preguntó ayer Taymaz Abubakárov, el jefe de la delegación del Gobierno checheno al comenzar su parlamento en las conversaciones que se desarrollan en la capital de Osetia del Norte con representantes del Gobierno ruso. Siguió un silencio, en un diálogo que parecía de sordos. Este primer encuentro terminó sin acuerdo pero las negociaciones proseguirán hoy martes, según informaron fuentes oficiales rusas.

Los chechenos aceptan, discutir los tres puntos que plantean los rusos: cese del derramamiento de sangre, desarme de todas las formaciones y creación de condiciones "para normalizar la vida en Chechenia". El problema es que los representantes del Gobierno checheno y del ruso plantean condiciones diametralmente opuestas. Los chechenos piden que se levante el cerco militar y que se retiren los soldados, entonces ellos se desarmarán. Los rusos piden exactamente lo contrario: que primero se desarmen los chechenos y entonces retirarán las tropas.

A pesar de estas posiciones aparentemente irreconciliables, anoche se intentaba redactar un texto de acuerdo que pudiera traspasar el problema del desarme a los militares y así salvar estas negociaciones.

La delegación oficial chechena salió ayer por la mañana de Grozni a gran velocidad en una caravana de seis coches, que abría y cerraba un vehículo policial. La columna tuvo que desviarse por un camino secundario, pues la carretera principal estaba ocupada por los soldados rusos, y en la frontera con Osetia del Norte los chechenos fueron recibidos con el paso de los tanques rusos. Impotentes, tuvieron que contemplar largo rato cómo las blindados enemigos avanzaban en dirección a Grozni mientras ellos esperaban poder seguir camino a Vladikavkaz.

Las discusiones se complican aún más por el hecho de que, como reconoció a esta corresponsal Alexandr Aslónov, viceministro ruso de Educación, la delegación rusa no tiene influencia alguna sobre el mecanismo bélico.