Eguiagaray liberalizará el mercado de carburantes en los próximos cuatro meses

Juan Manuel Eguiagaray está dispuesto a concluir la liberalización del mercado de carburantes antes de que termine el primer trimestre de 1995, según el calendario propuesto en la Comisión Delegada para Asuntos Económicos del pasado miércoles. En estos cuatro meses, el Ministerio de Industria suprimirá el régimen de distancias mínimas para la instalación de gasolineras, para que bajen los precios para el consumidor, cambiará la cesta de productos sobre la que se fijan los precios de referencia de los carburantes y reducirá los costes de las petroleras con la creación de la Corporación de Reservas Estratégicas.La Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos del miércoles examinó uno de los temas estrella de la liberalización económica en curso: un conjunto de disposiciones normativas que liberalizarán el mercado de distribución de carburantes (gasolinas y gasóleos). Para mayor exactitud, la Comisión analizó el calendario que el Ministerio de Industria y Energía ha preparado para ejecutar la mencionada liberalización. El departamento considera que el conjunto de medidas liberalizadoras estará redactado, examinado y aprobado por el Gobierno a finales del primer trimestre de 1995.

El paquete, liberalizador del mercado de carburantes ha comenzado ya su andadura, con la aprobación del decreto por el que se crea la Corporación de Reservas Estratégicas. El funcionamiento de esta Corporación permitirá que las empresas reduzcan los costes de mantenimiento de las reservas estratégicas -cantidades de crudo y derivados de almacenamiento obligatorio para prevenir problemas de suministro, según las normas impuestas por la Agencia Internacional de la Energía y la CE- con lo cual podrá aumentar la competencia en precios.

Pero la norma más relevante y espectacular de la liberalización será el decreto que suprime las distancias mínimas entre gasolineras. El Ministerio de Industria considera, en coincidencia con la opinión de otras instituciones económicas, que la fijación de precios máximos, una liberalización en la práctica, no ha sido suficiente para provocar una competencia en los precios de las gasolinas y derivados. Su interpretación es que debe romperse el régimen de distancias mínimas (en ciudad y en carretera), de forma que la proximidad de estaciones de servicio obligue a reducir, los precios en el margen que permitan los precios. Se supone que ésta es la última decisión liberalizadora posible para estimular la rebaja real de precios. El borrador de decreto que suprimirá las distancias mínimas ya está redactado.

Nueva cesta de precios

El ministerio elabora también una nueva cesta de productos a partir de la cual se fijarán los precios de referencia de las gasolinas. Por el momento, no le considera conveniente prescindir del régimen de precios máximos; pero este sistema deberá revisarse cuando el Tribunal de Defensa de la Competencia emita su informe sobre si existe o no existe competencia real de precios en la actualidad.Además, el área energética prepara un decreto que liberalizará los requisitos para la distribución de productos petroleros -eliminará la exigencia a los operadores de contar con contratos de suministro en exclusiva y, por lo tanto, bajarán los precios- y se está analizando la posibilidad de unificar los gasóleos. Estas medidas, propuestas por Industria como su parte del Plan de Reformas Estructurales que prepara el Gobierno, son, en opinión de Equiagaray y su equipo, más eficaces para aumentar la competencia de la economía que la reducción del precio de la gasolina en dos pesetas, finalmente descartada.