La OTAN hace planes para retirar a sus soldados

La OTAN decidió ayer preguntar a sus Estados miembros con qué fuerzas estarían dispuestos a contribuir a una eventual operación para retirar a los cascos azules de la antigua Yugoslavia. Francia ha pedido a la Alianza Atlántica la elaboración de planes detallados sobre este punto, considerando que los esfuerzos de mediación en Bosnia están llegando a un callejón sin salida.Coincidiendo con estos movimientos, el líder serbobosnio, Radovan Karadzic, ha dicho en Pale que está dispuesto a reanudar las conversaciones de paz sobre Bosnia con el Grupo de Contacto y poner fin a la guerra.

Karadzic añadió que las "interpretaciones nuevas" del plan de paz modificado, expuesto en Belgrado al presidente serbio por los mediadores internacionales, son "un buen punto de partida para nuevas conversaciones" de paz. El punto fundamental del plan revisado es permitir una confederación entre los serbios de Bosnia y los de Serbia y abrirse al canje territorial entre serbobosnios y musulmanes. Los mediadores internacionales, David Owen y Thorvald Stoltenberg, se reunieron el martes por la noche con el presidente Slobodan Milosevic.

Anoche, aún no se había iniciado la retirada de la tercera parte de los 1.200 cascos azules bangladeshíes que teóricamente protegen el enclave musulmán de Bihac, en el noroeste de Bosnia, declarada zona segura por la ONU, pero en realidad a merced de las tropas serbobosnias desde hace casi dos semanas. El mando de la ONU en Bosnia había asegurado horas antes el inicio de la operación. Sin embargo, un portavoz militar precisó luego que existían dificultades al no permitir los serbobosnios el paso por su territorio. Los efectivos retirados serán reemplazados, dijo la fuente.

La decisión de Naciones Unidas coincide con el crescendo de declaraciones sobre la permanencia o no de sus tropas de pacificación en Bosnia. Mientras en Londres se especula con que el ministro de Defensa podría recomendar una rápida retirada de sus soldados, tras una visita de dos días a Bosnia, el Gobierno de París afirmaba, matizando a su Ministerio de Exteriores, que Francia no ha tomado ninguna decisión en este sentido y que el repliegue, si se acordase, llevaría meses.

El portavoz del primer ministro Édouard Balladur precisó ayer que el tema sería reconsiderado si se produce un efectivo levantamiento del embargo de armas a los musulmanes bosnios, porque esta circunstancia sí que añadiría un plus de peligro para las tropas de la ONU. Por su parte, el titular británico de Exteriores, Douglas Hurd, dijo ayer que Londres desea la permanecia de sus tropas en Bosnia, "pero siempre que estén en condiciones de poder cumplir con su mandato sin correr riesgos inaceptables".

Hurd señaló que "corno en toda operación militar, se planean soluciones para diferentes eventualidades, incluyendo la retirada, que son constantemente puestas al día"; pero, añadió, Londres trabaja con sus aliados en la OTAN y en la ONU, y no se retirará unilateralmente.

Los serbobosnios mantienen bloqueados en diferentes zonas a alrededor de 350 cascos azules, a los que utilizan como escudo contra eventuales ataques de la OTAN. Además, impiden o ponen continuas trabas a la. circulación de los convoyes. Naciones Unidas protestó ayer en Sarajevo por dos nuevos ataques contra sus tropas por parte serbia: un puesto de observación cerca de Kalesija, en el noreste del país, y una patrulla a pie británica, junto a Gorazde.

Ayer mismo, y como parte de su tira y afloja con Unprofor, las fuerzas rebeldes serbias de Croacia, que ocupan la Krajina, dieron permiso para que un convoy humanitario de la ONU parta hoy de Zagreb hacia Bihac, donde los combates han perdido intensidad. Será el primero en dos meses que podrá socorrer a las 40.000 personas que resisten el asedio serbio y tendrá 10 camiones con 100 toneladas de alimentos.