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La ONU exige a los serbios que se retiren, pero no les amenaza con ataques

Antonio Caño

El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ha exigido oficialmente la retirada de los serbios de la ciudad bosnia de Bihac, pero las profundas diferencias puestas de manifiesto entre los cinco miembros permanentes del citado organismo impidieron una reacción más enérgica."El Consejo insiste en la retirada de todas las fuerzas militares serbobosnias del área protegida de Bihac y el respeto de todas las partes a las áreas protegidas, para beneficio de la población civil", afirma la declaración respaldada en la noche del sábado por los 15 miembros del Consejo de Seguridad.

Incluso esta suave declaración estuvo en peligro porque Rusia, uno de los miembros con derecho a veto, se oponía a pedir la retirada exclusivamente de los serbios, y solicitaba que el máximo órgano de la ONU pidiese la salida de Bihac de todas las fuer zas combatientes. El embajador del Gobierno bosnio, de mayoría musulmana, en las Naciones Unidas, Mohamed Sacirbey, señaló que había quedado claro que "ciertos países" utilizan el Consejo de Seguridad como una barrera. de protección para ocultar que no quieren hacer nada en Bosnia "y esos países son la Federación Rusa, el Reino Unido y Francia".

Diferencias entre aliados

La reunión del Consejo, dejó también al descubierto las diferencias entre Estados Unidos y sus aliados europeos de la OTAN. Francia y el Reino Unido se quejan de que la Administración estadounidense pida más firmeza contra los serbios cuando no tiene fuerzas militares desplegadas sobre el terreno.

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En este sentido, el envío de 2.000 marines al Adriático para permanecer en estado de alerta por si su intervención fuese necesaria no parece suponer un cambio de la política estadounidense. El secretario de Defensa, William Perry, declaró ayer en la televisión que los soldados estadounidenses no participarán en combates y que únicamente han sido enviados ante la posibilidad de que la extensión del conflicto amenace la seguridad de los cascos azules y del personal de la ONU.

Perry manifestó que su Gobierno sigue siendo contrario a intervenir con fuerzas militares de tierra en Bosnia. El secretario de Defensa explicó que, para que la intervención norteamericana pudiera ser decisiva, sería necesaria la participación de decenas de miles de hombres.

Perry añadió que los bombardeos de la OTAN sobre los serbios en Bihac ya no serían eficaces y se mostró resignado a la caída de esa ciudad.

En París, los ministros de Defensa y Exteriores se reunieron en la sede de la jefatura del Gobierno con el primer ministro Edouard Balladur y miembros del Alto Estado Mayor para revisar la situación y ofrecer hoy al presidente François Miterrand una postura clara ante la ofensiva serbia sobre Bihac.

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