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Palomino tiene un contencioso fiscal por 11,5 millones con la Junta andaluza

Francisco Palomino Romera, cuñado del presidente del Gobierno, Felipe González, mantiene un contencioso fiscal con la Junta de Andalucía por unos 11,5 millones de pesetas. El conflicto arranca de febrero de 1991 por discrepancias con la administración andaluza en la valoración de un inmueble de 4.597 metros cuadrados, que le fue donado por sus padres, y en el que se hallaban los antiguos talleres de su empresa.Palomino ha pagado unos cinco millones por el impuesto sobre donaciones, pero el Servicio de Gestión Tributaría de Andalucía le reclama además de lo pagado otros 11,5 millones. El caso lo examina el Tribunal Económico Administrativo Regional de Andalucía (TEARA). El director general de Tributos de la Junta, Antonio Estepa, ha asegurado que no existe ninguna irregularidad, pese a que han pasado más de tres años.

Francisco Palomino presentó el 12 de febrero de 1991 ante el Servicio de Gestión de Impuestos Públicos de la Junta la escritura de donación del bien y valoró el inmueble en unos 30 millones de pesetas, según el valor catastral.

En julio de 1991, el Servicio de Gestión valoró el inmueble en 108 millones. Palomino recurrió esta tasación. El 22 de noviembre la Junta resolvió el recurso rebajando SIL valoración a unos 81 millones y le presentó una liquidación global por unos 16,6 millones de pesetas.

Recurso al TEARA

Palomino recurrió entonces esta decisión ante el TEARA pero la Junta no se enteró. El tribunal tardó casi año y medio en reclamar a la Junta el expediente. Reclamó un expediente de transmisiones en lugar de una donación. La Junta recibió el 17 de marzo de 1993 la primera petición equivocada y hasta el 8 de junio de ese año no logró aclarar el entuerto.Paralelamente, el Servicio de Gestión liquidó el impuesto sobre los 81 millones al ignorar el recurso. Transcurrido el plazo voluntario de pago, lo pasó a la Diputación de Sevilla para su cobro por la vía de apremio con el incremento del 20%.

Cuando a mediados de 1993 el TEARA le reclama el expediente, la Junta descubre que existe un recurso contra su tasación. El Servicio de Gestión comunica entonces a la Diputación que suspenda el cobro.

Una vez paralizado este trámite, la Junta tramitó el cobro del impuesto en base a la liquidación del interesado. En octubre de 1993, Palomino pagó cinco millones, según la base imponible que había declarado.

El PAÍS ha consultado el proceso de este expediente con el director general de Tributos, Antonio Estepa, y ha confirmado igualmente ante el TEARA la existencia de un reclamación de Francisco Palomino aún sin resolver. Estepa ha manifestado que el procedimiento es "absolutamente legal", ha negado rotundamente la existencia de irregularidades y ha asegurado que el retraso es un problema, "generalizado".

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