Universidad de Almería

Los cimientos en la Universidad de Almería carecen de las. calidades básicas que la buena lógica y la ley imponen. Me refiero a las ausencias de calidad y legalidad de los procedimientos de selección de los cuerpos docentes.A la Universidad se va a aprender cómo saber. Para esto lo esencial son buenos profesores, buenas bibliotecas y también buenos gestores. Más aparcamientos, más despachos, más aire acondicionado es sólo secundario y prescindible.

La Universidad de Almería no ha tenido en esos primeros pasos cruciales y fundamentales alguien que hubiera velado por la corrección de los actos administrativos que en ella se han producido. Pero, eso sí, la Universidad tiene sus jardineros, sus fotocopiadoras (donde impunemente se acribillan los libros), su higuera, sus despachos biplaza con ordenador y teléfono, su bar...

La reparación es muy complicada, incluso cuando llega esa persona que vele, entre otras cosas, por la legalidad de los procedimientos de selección del personal docente. El problema será otra vez la incapacidad e intereses de quien selecciona.

Cuando los alumnos detecten la necedad de un profesor no deben culparle a él, deben culpar a quien con prisa o negligencia se encargó de su selección. La inocencia del profesor es lo atrevido de su ignorancia y la permisividad, incompetencia o necedad de quien le dio tan grandísima responsabilidad.

Dicen que la Universidad de Almería se está convirtiendo en un lugar de retirada de aquellos que con cargos públicos y seudopúblicos ven hoy amenazado su futuro profesional después de próximas elecciones pero es tas cosas que se dicen, no son su ficientemente buenas como para ser ciertas. La calidad de una universidad no la determina la variedad de títulos que ésta ofrece. Lo mucho, o, mejor, lo poco que se enseñe debe enseñarse bien, y eso sólo lo garantiza una docencia cualificada. Ha habido demasiada prisa. por ofrecer muchos títulos y precipitación e incompetencia a la crucial hora de seleccionar parte del profesorado.

Algunas aulas de la Universidad de Oxford no tienen calefacción, la de Hull tiene instalaciones estupendas. La de Oxford no deja de producir eminencias, sobre la calidad de la de Hull se ceba el más despiadado- humor inglés-