MINI Y MAXI Y OTROS COCHECITOS

Ha cumplido ya 35 años. Su tamaño se mantiene reducido pero su prestigio aumenta. Deseado por los jóvenes en los años sesenta, es ahora el vehículo preferido por las mujeres y los conductores novatos. Se trata del Mini, el coche disefiado por Alec Issigonis en 1959. El pasado fin de semana, el Reino Unido, su país de origen, le ofreció un homenaje en exclusiva en la I Feria Nacional del Mini Mundial. Los organizadores han reunido 100 modelos de este símbolo de la industria británica, que pudieron ser inspeccionados por curiosos y expertos en el parque de Sandown, a las afueras de Londres. El ex campeón de formula 1 John Cooper, quien cedió su apellido al Mini-Cooper, conducía hasta el recinto uno de los últimos modelos de carreras montado en Inglaterra. En la feria estuvieron también una limousine Mini y, entre otros, el Mini Penny Lane, decorado con incrustaciones de monedas en recuerdo al famoso tema de los Beatles. Otro automóvil carismático, también pequeñito y todo un pionero de la automoción, el seiscientos, no tuvo tanta suerte. Los organizadores del Salón Auto Retro no consiguieron juntar, hace una semana, los seiscientos necesarios para batir el récord Guinness de la especialidad, aunque lograron que 234 automóviles de este modelo subieran hasta el estadio olímpico de Montjuïc. Habían previsto reunir hasta 600 vehículos del seíya, pero el mal tiempo impidió la participación de varios propietarios que, a pesar de estar inscritos en la prueba, no pudieron desplazarse por residir fuera de Barcelona. El Salón Auto Retro, que se celebró entre el 5 y el 13 de noviembre en el estadio olímpico de Montjuïc, exhibió el primer coche fabricado en el mundo, un Benz del año 1886, además de los más famosos modelos Rolls-Royce e Hispano Suiza del Rallye Protagonistas 95. Y si hablamos de Rolls-Royce ya tenemos que emplear palabras mayores. Comprar un Rolls-Royce o un Bentley en España cuesta entre 24 y 45 millones, dependiendo del modelo. Por eso 1994 seguirá siendo un mal año para el mercado de coches de lujo en nuestro país. La firma británica Rolls-Royce ha vendido aquí 10 coches en lo que va de año, y espera finalizar el ejercicio con unas ventas de entre 12 y 15 automóviles. Según informan a Servimedia fuentes del distribuidor de estos vehículos en España, el mercado español de coches de lujo comenzó a notar la crisis económica a principios de 1991, y la situación no ha cambiado en 1994, pues el mercado de coches de lujo no ha notado todavía la reactivación económica. Mientras tanto, en China, el que parece que va a triunfar será el Caballito del Diablo, un coche familiar que parece más un seiscientos moderno, aunque las familias chinas hasta ahora eran bastante numerosas.-