Fuertes choques entre manifestantes de Hamás y la policía palestina en Gaza
La Policía palestina dispersó ayer con porras y culatazos de fusil, por segunda jornada consecutiva, a los miles de simpatizantes del Movimiento de Resistencia Islámica Hamás que tomaron las calles de Gaza para exigir la libertad de cientos de activistas de este grupo radical.Alrededor de 3.000 estudiantes de la universidad islámica de Gaza se encaminaron hacia la prisión central de la ciudad donde se encuentran cerca de 400 militantes de Hamás, detenidos por los agentes de la Autoridad Nacional Palestina a raíz del secuestro y posterior asesinato por sus captores, en el momento en que un comando iba al liberarle, del soldado israelí Nachshon Waxman.
La policía cerró una de las principales calles de Gaza para impedir la llegada de los estudiantes a la prisión, ante la que se habían concentrado centenares de agentes, que procedieron a dispersar a los jóvenes. Otros 300 estudiantes afectos a Hamás trataron de penetrar en el asentamiento judío de Netzarim, enclavado en Gaza, pero también la policía palestina se encargó de impedírselo. Todo esto revela como día a día se agravan los enfrentamientos entre Hamás y los responsables de la autonomía que preside Yasir Arafat.
Ibrahirri Azuri y otras personalidades de Hamás, detenidas hace tres días, fueron liberadas ayer "porque no se establecieron sus lazos con la organización militar de Hamás [las brigadas Azedim al Kasam, responsables del secuestro de Waxman]", indicó un comunicado de la policía palestina. Alrededor de 400 militantes son aún interrogados.
Los dirigentes islámicos se niegan a entrevistarse con Arafat mientras uno solo de sus militantes continúe en prisión. Además, la dirección de Hamás ha publicado un folleto en el que insta a los miembros y simpatizantes de la organización a no confiar en los representantes de la autoridad palestina y a no informarles de nada porque transmiten toda información al Shin Beth, los servicios de espionaje israelíes.
De esta forma se intensifican los esfuerzos de Hamás por deslegitimar a Arafat y a su equipo.
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