Botijos y aclaraciones

En relación con la carta de José A. Sánchez, publicada el día 9 de septiembre, en la que se criticaba el trabajo que hemos realizado para estudiar el enfriamiento del agua contenida en un botijo, nos gustaría puntualizar lo siguiente:Nuestro trabajo consistió inicialmente en comprobar que el agua efectivamente se enfriaba, cuestión que encontraba controversia, pues había quien pensaba que el botijo se limitaba a mantener fría el agua por su carácter de buen aislante térmico. Una vez comprobada dicha cuestión, intentamos encontrar las ecuaciones que regulaban ese, efecto térmico. Todo este trabajo se realizaba en tiempos perdidos, cuando las tareas docentes e investigadoras de otra naturaleza lo permitían, por lo que no se debe pensar que le dedicaron años de trabajo intenso a resolver la cuestión.

Como, puede suponer. quien haya realizado investigación científica, la comprobación de que el modelo termodinámico aplicado coincidía con lo obtenido experimentalmente nos llenó de satisfacción. El hecho de enviar el trabajo a una revista norteamericana se debió fundamentalmente a que en España no se editan revistas de educación específicas de la ingeniería química. Es precisamente en esta área de conocimiento donde. pensamos que lo estudiado tendría más aplicaciones, pero, esencialmente, de índole pedagógica, dado que es un tema motivante para los alumnos e implica en su estudio una gran variedad de conceptos.

El que la noticia, publicada en este diario, trascendiera lo puramente académico, fue accidental. El interés despertado posteriormente, del que fuimos los primeros sorprendidos, sólo es explicable por el hecho de ser el botijo un recipiente muy tradicional y familiar en toda España.- Gabriel Pinto. Cañón y José Ignacio Zubizarreta Enríquez.