_
_
_
_
_

Amistad escandalosa

Alarma jesuita ante la publicación de las cartas entre el teólogo Rahner y una escritora

"Pececito, no comas demasiado; si no, engordas y dejas de gustarme". Firmado: "Tu cariñito". La escritora alemana Luise Rinser, al publicar estas y otras cartas semejantes a Karl Rahner, uno de los teólogos jesuitas más importantes de este siglo, no podía por menos de suscitar un cierto escándalo. Ya el título del libro, que se publicará uno de estos días en Alemania, Cartas de una amistad (editorial Kloesel, Múnich), hace suponer que la publicación no tendría la aprobación de la Compañía de Jesús.Desde el primer momento, los jesuitas prohibieron a la escritora que publicara en su libro ni siquiera una frase de Rahner, a la vez que realizaban una severa protesta por la decisión del editor de sacar a la luz unas cartas tan íntimas.

Después de lo de mi calamarcito, tan de moda durante un escándalo regio en el Reino Unido, he aquí que el mundo marino, con este pececito, fascina nuevamente entre los amores prohibidos, ya sean platónicos o no. "Es de un mal gusto terrible", comenta el diario Sueddeutsche Zéitung. "Luise Rinser ha querido publicar a toda costa la parte suya de la correspondencia: ha violado lo que ciertas personas denominan tabú y que nosotros definimos como decencia".

Luise Rinser escribía a su "teólogo astronauta", prisionero del celibato: "Me asusta que tú me ames con esa pasión". Y después lo consolaba: "Así está decidido, que tú bebas del cáliz del dolor humano". Y aún más: "A partir del momento en que has conocido tanto el amor como el dolor, has logrado ser mucho más grande". Las 480 páginas de cartas de la conocida escritora al todavía más conocido teólogo hablan de religión y teología, pero impresionan sobre todo por una intimidad que supera los límites de la castidad.

¿Será que, Luise Rinser, escritora, política comprometida con Los Verdes alemanes, católica, que vive en Italia desde hace años, ha decidido provocar un escándalo a la respetable edad de 83 años?

En cualquier caso, las 1.800 cartas que Rahner le escribió hace aproximadamente 30 años, cuando era profesor de Dogmática en Innsbruck, seguirán siendo tabú. "Karl Rahner", ha afirmado el padre Joerg Dantscher, jesuita de Múnich, "declaró más de una vez a sus hermanos correligionarios que no quería en absoluto que se publicaran sus cartas. Él estaba en contra de su publicación porque el carácter privado de las cartas se presta a malentendidos".

Sin embargo, los jesuitas han puesto especial empeño en precisar la introducción que la escritora hace de su libro, ya que puede dar la impresión de que la Compañía quiere impedir la publicación de las cartas del teólogo contra la verdadera intención del teólogo Rahner.

El célebre teólogo escribe a su interlocutora epistolar que quiere compartir una casa en el cielo con su cariñito. El cariñito, que por aquel entonces ya tenía 50 años, no pierde la ocasión para contar a su pececito que un jovenzuelo de 23 años le lleva siempre flores.

Pero el celibato no es el único obstáculo entre ellos. Existe incluso una segunda pasión de Luise Rinser: un monje benedictino de Baviera. Luise recuerda la primera cena junto con Karl Rahner, en el restaurante El Oso Gris, de Innsbruck: "Yo, muchachita, pensaba: '¿qué haría ahora si apoyara mi mano en la suya? Pero, como es natural, no lo hice. Para compensar todos esos años he escuchado sus palabras, que eran como una tierna cascada".

El portavoz de la Compañía de Jesús, padre De Vera, precisó que la escritora había hecho saber desde hace varios años a los jesuitas alemanes que quería publicar las cartas de Rahner, que, según sus datos, son en gran parte de carácter filosófico y religioso, informa Efe. De Vera añadió que la escritora no tiene "malas intenciones" hacia el teólogo Rahner, ya que "lo recuerda todavía con gratitud"

"Como orden", explica en un comunicado oficial la Compañía de Jesús, "hemos tenido siempre un gran respeto por la discreción, considerándola un bien precioso y, por tanto, no hay discusión sobre el hecho de respetar la voluntad del padre Rahner".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_