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Entrevista:

"No me importa la edad de los periodistas, sino su talento"

Ian Hargreaves ha aceptado el reto de dirigir el periódico más joven del Reino Unido, fundado en 1986 por un grupo de periodistas entusiastas. Lo hace en momentos de extrema turbulencia para la prensa británica, enfrentada a una dura guerra de precios que amenaza la existencia de los diarios más vulnerables dentro del panorama informativo del país. The Independent, según reconoce su flamante director, estudia un inminente recorte en el precio de cada ejemplar, actualmente de 50 peniques (unas 100 pesetas), frente a los 20 y 30 que cuestan respectivamente The Times y The Daily Telegraph.Pregunta. En el actual contexto de guerra de precios, ¿cree usted que The Independent podrá sobrevivir?

Respuesta. Creo que puede sobrevivir y sobrevivirá, pero también hay que reconocer que la situación de la prensa británica es la peor de los últimos 15 años. La supervivencia requiere dos cosas: por un lado, que los propietarios de los periódicos sean pacientes a la hora de esperar el beneficio de sus inversiones, y por otro, una operación editorial que dé como resultado un periódico que la gente quiera leer. La primera condición la ha alcanzado The Independent con el cambio que se ha producido este año en la estructura de propiedad del periódico: la unión de accionistas de El PAÍS, La Repubblica y el propietario irlandés O'Reilly. Ahora tenemos una estructura empresarial que puede sostener el periódico. En lo que respecta a la segunda cuestión, es algo que me atañe a mi, como nuevo director, comprobar que The Independent es un periódico que la gente quiere leer.

P. ¿Sería una solución recortar el precio del diario?

R. Esa es una decisión que deben tomar los dueños, no yo. Aunque sí creo que el precio debe reflejar más la situación actual del mercado.

P. Usted procede del periodismo económico, lo mismo que el anterior director y fundador de The Independent, Andreas Whittam Smith. Me pregunto si coinciden ustedes en más cosas. Por ejemplo, ¿piensa usted como él que lo esencial es que la plantilla de redactores no sobrepase los 35 años de edad media?

R. No, no, en absoluto. Yo creo que en los periodistas sólo importa su objetividad, su talento, su compromiso con el periodismo. Eso es lo único que funciona, la independencia de criterio y el compromiso.

P. ¿Por qué abandona usted la dirección adjunta del Financial Times, reputado como uno de los mejores periódicos económicos?

R. Obviamente, ser director de un periódico es un reto mucho mayor y más interesante que ser el director adjunto en otro. He aceptado la dirección de The Independent porque es un reto que quería afrontar, no porque no me guste mi trabajo en el Financial Times.

P. ¿Sigue habiendo un sitio para un periódico independiente de los dos grandes partidos políticos en el Reino Unido?

R. Por supuesto. Las últimas elecciones han demostrado que hay un margen considerable de gente que no vota a ninguno de estos dos partidos. Y creo que la polaridad entre derecha e izquierda es algo que se ha roto ya, no sólo aquí sino en todo el mundo, y en Europa, por supuesto. Eso es terreno abonado para un periódico independiente.

P. Usted ha dicho que la independencia de la prensa es, ahora más importante que nunca en el Reino Unido, cuando dos grandes magnates de la comunicación [Murdoch y Black] se disputan el grueso del mercado. ¿Es realmente posible esa independencia?

R. Desde luego. Creo que hay una gran diferencia entre un periódico con un dueño normal y un periódico completamente dominado por un propietario que tiene un fuerte compromiso de lealtades políticas que le lleva a trazar, incluso, la línea que el periódico debe seguir, como es el, caso de Rupert Murdoch y Conrad Black. En este país se da también el fenómeno de periódicos comprometidos previamente con una determinada línea política, conservadora o laborista, con una lealtad política. Si The Independent fue un éxito al principio y obtuvo una amplia base de lectores, aunque se haya producido un declive -y no niego que puede haber muchas razones que lo expliquen-, lo que está claro es que hay un gran potencial todavía para este periódico, y que puede volver a superar los 300.000 ejemplares de ada. Aunque puede que tardemos todavía un poco en lograrlo.

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