El incendio de un puente obliga a cerrar cinco horas la carretera de Colmenar

Fuego, calor y tráfico. Las circunstancias se aliaron ayer para convertir en una trampa la entrada por la autovía de Colmenar entre las dos y las siete de la tarde. La vía estuvo cortada durante esas cinco horas, el tiempo que tardaron los bomberos en extinguir el incendio declarado en el puente del futuro tramo de la M-40, que sobrevuela la carretera.

Las llamas comenzaron poco antes de las dos de la tarde. Según explicó un portavoz de los bomberos, unos obreros estaban trabajando en el puente (aunque era día festivo). De un soplete saltó una chispa que prendió el encofrado. Estos moldes de madera que contienen el hormigón hasta que fragua comenzaron a arder como yesca. El fuerte calor reinante ayudó a la propagación del fuego, combatido por las dotaciones de nueve coches.

El incendio obligó a cortar la carretera en dirección a Madrid. Si en un primer momento se desvió el tráfico por una pista de tierra junto a la carretera, posteriormente la Guardia Civil obligó a los conductores a desviarse por Alcobendas, por una vía en obras. "La circulación se hizo más lenta en la zona, pero no se registraron atascos muy importantes", según la Dirección General de Tráfico.

Los bomberos pidieron a los técnicos de la obra que supervisaran su seguridad tras el siniestro. Temían que "el hormigón se hubiera reblandecido y pudiera desplomarse". Los responsables del puente estimaron que no había tal peligro.

Ayer se produjeron retenciones, debido al fuerte tránsito, en las carreteras de La Coruña (Villalba) y Extremadura (Móstoles). Pero el puente de Santiago no ha dejado víctimas mortales en Madrid.