El empresariado catalán se desmarca de Cuevas y critica su petición de elecciones anticipadas

Los empresarios catalanes han expresado públicamente su disconformidad con las recientes declaraciones del presidente de la CEOE, José María Cuevas, en las que pedía a Felipe González que convoque elecciones anticipadas o se someta a una cuestión de confianza en el Parlamento. Fomento del Trabajo, la gran patronal catalana, criticó ayer las afirmaciones de Cuevas y las calificó de mera "exposición de criterios personales", mientras que importantes empresarios han lanzado advertencias contra el peligro de que la patronal "adopte posiciones políticas partidistas".

Las críticas contra Cuevas proceden de empresarios tradicionalmente próximos al presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, y de otros sectores que han mantenido cierta fidelidad a la política económica de los últimos años, expresada ahora en el pacto PSOE-CIU.Cuevas se alineó con las tesis del PP el viernes pasado, al pedir a González el adelanto electoral, la presentación de un programa de actuación hasta 1997 y la presentación de la cuestión de confianza. A juicio de Cuevas, la actual situación política siembra incertidumbre entre los inversores.

El comité ejecutivo de Fomento del Trabajo aprobó por unanimidad un comunicado en el que se afirma que "todo empresario, como ciudadano, tiene sus opiniones personales sobre los más diversos temas, y las manifestaciones de estos últimos días son expresión de criterios personales", rompiendo así el consenso en torno a las posiciones de Cuevas.

El documento concluye señalando que "Fomento del Trabajo Nacional y las organizaciones empresariales de CEOE son apartidistas y no siguen la estela de partido político alguno, sino que defienden los intereses propios de los empresarios y sus empresas".

El presidente del Círculo de Economía, Joan Molins, señaló asimismo que "anticipar las elecciones sí supondría crear incertidumbres, mientras que los actuales acuerdos entre el PSOE y CiU son un elemento que favorece el relanzamiento de la inversión", en clara oposición a las opiniones de Cuevas.

Fuentes de Fomento, cuya presidencia ocupa Alfredo Molinas, han señalado que el sentido de su declaración "es el de manifestar claramente que la CEOE debe dejar hablar a los políticos y no suplantarlos, puesto que la política de alianzas y coaliciones es de su competencia". Las mismas fuentes no han descartado que Fomento plantee esta cuestión en la próxima junta de la CEOE, convocada para el 6 de septiembre, "en el caso de que no se haya rectificado".

Fuentes de Fomento consideran que "este comunicado es fruto de las presiones de los grupos más renovadores, que exigen al presidente, Alfredo Molinas, que haga frente a las declaraciones de Cuevas". Juan Rosell, vicepresidente de Fomento y de la propia CEOE, o Santiago Fisas, del sector textil, se encuentran entre ellos.

Entre los sectores afines al pujolismo críticos con Cuevas, se incluyen conocidos industriales, como Maria Puig, presidente de Antonio Puig.

Afines al PP

Incluso los sectores tradicionalmente vinculados al PP -Lorenzo Gascón, Juan Antonio Alguero o el hotelero Joan Gaspart- están dejando clara en esta ocasión su posición crítica frente a Cuevas, o lo que es lo mismo, su aceptación de que el clima de coalición socialistas-nacionalistas "sigue siendo positivo para afrontar de forma rotunda la salida de la crisis".El presidente de la Patronal de la Pequeña y Mediana Empresa de Cataluña (Pimec), que representa a 70.000 empresas, Agustí Contijoch, subrayó ayer que "en una situación de calma y estabilidad pueden adelantarse elecciones, pero actualmente, sin calma y sin estabilidad, debe tirarse del proyecto actual hacia delante". Otros sectores, no tan claramente identificados con Pujol o incluso distantes de él, han optado por pedir "que las opiniones que expresa la CEOE critiquen las medidas, cuando sean incorrectas, pero no el apoyo en sí a una u otra coalición o partido concreto".

Entre estos empresarios se incluyen los núcleos cercanos al presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Antoni Negre, o al Círculo de Economía, presidido por Joan Molins. También forman parte de este núcleo pragmático sectores representativos del Instituto de la Empresa Familiar (IEF).

José Manuel Lara, vicepresidente del grupo editorial Planeta y vicepresidente del IEF, afirma, respecto a las opiniones del presidente de la CEOE, que "es improcedente que tome posiciones públicas partidistas".

Para Lara, "la CEOE debe explicar su filosofía sobre cualquier tema empresarial, pero debe tener un cuidado exquisito de no identificar su posición con la de ningún partido, máxime cuando existen sospechas de que la CEOE puede mantener una acusada relación con un partido concreto".

El vicepresidente de Planeta estima que "las declaraciones de Cuevas no ayudan a la estabilidad ni contribuyen a crear confianza, excepto si existe algún interés político".