Disciplina y agresividad

Ya están donde querían. Entiende el grupo de Clemente que llegar a los cuartos de final les ha de servir para redimir cualquiera de los pecados que se les achaca. Puede que los rivales dejados en la cuneta (Bolivia, Corea y Suiza) no suenen a fútbol ni que su propio juego enamore o seduzca. Pero la mayoría de ellos, como dice su técnico, vinieron a ganar, a superar al menos los octavos de final, a evitar las comparaciones con el legado mundialista de la Quinta del Buitre, y a partir de ahí sueñan con que puede ocurrir de todo."¿Liberados? ¿Si nos sentimos liberados?", preguntó Clemente a un periodista que le requería sobre el estado anímico del equipo. "El equipo no se debe liberar, porque siempre lo ha estado. No ha sentido la presión", replicó. "Los que sí deben liberarse son algunos periodistas, y tienen una semana para hacerlo. No pienso en lo que me van a decir mañana si me critican. No me voy a alterar. Yo quiero ganar". El seleccionador recuperó su agresividad verbal y apuntó a sus críticos con cierta reiteración. "A ver si mañana hacen otra encuesta preguntan do por Zubizarreta", expuso. "Andoni se ha merecido el reconocimiento de todos. Pese a las críticas y a todo lo que ha tenido que aguantar, ha demostrado que es uno de los mejores porteros del mundo".

El resumen que hizo Clemente del partido con una evidente afonía no admitió medias tintas. "Hemos hecho un encuentro extraordinario ante un rival dificultoso, al que hemos tapado bien las bandas y ha notado la baja de Sutter. Los jugadores han rozado casi la perfección. Ganamos con contundencia. La victoria es de ellos, exclusivamente de los futbolistas, no mía. No quiero entrar en este terreno".

¿Y ahora?, se le preguntó. "Dormir, descansar y al oído te diría otra cosa, pero me la callo", acabó Clemente, mientras aseguraba que no tenía preferencias sobre el rival de cuartos: Italia o Nigeria. "Debemos jugar contra quien más se lo merezca. Enfrente tendrá un equipo con mucho entusiasmo como el nuestro". Clemente concedió entonces el protagonismo a los jugadores. Todos coincidieron en el diagnóstico del encuentro: "Disciplina y agresividad".

"Hoy es un gran día"

"Es el triunfo del grupo", apuntó Bakero. "Hoy es un gran día para el fútbol español y para nosotros. Estamos cansados, pero también. contentos, porque hemos jugado bien, pese a que ha entrado mucha gente nueva en el equipo ya que el calor era insoportable. Ahora vamos a disfrutar y no a hablar de tácticas, esquemas y de otras cosas". Goikoetxea agregó: "Sabíamos que su defensa era el punto débil y la hemos sabido atacar con agresividad mientras defendíamos con disciplina".

Los más sonrientes eran los poneys, como se conoce a Ferrer y Sergi. "En el primer tiempo estuve algo perdido", se disculpó Sergi, "pero en el descanso el entrenador me ha corregido la posición y he estado muy a gusto. Clemente nos enseñó por vídeo que la defensa en línea y adelantada de Suiza era superable. Nos mostró cómo hacerlo, nos alentó a jugar rápidos y salió bien". Ferrer expuso: "Es el triunfo del equipo como tal. La disciplina, la entrega y la unidad nos han llevado hasta aquí. En todas las carreras se notaba que el equipo estaba compacto, unido". El otro triunfador, Luis Enrique, asintió a las explicaciones de los zagueros: "Hemos jugado como nos gusta: bien parapetados y al contragolpe. La verdad es que me he sentido muy a gusto con mi puesto. Me he reencontrado".