Solchaga pide a Cuba que liberalice más su economía e impulse la iniciativa privada

El ex ministro de Economía Carlos Solchaga ha propuesto a las autoridades cubanas un plan para reactivar la economía de la isla basado en cuatro puntos fundamentales: la eliminación de los subsi dios a las empresas estatales, la liberalización del autoempleo y la apertura a ciertas formas de iniciativa privada, la flexibilización de la Ley de Inversiones y la autorización a las cooperativas para que vendan directamente sus excedentes en el mercado.

Solchaga ha viajado a Cuba por segunda vez en menos de un año y durante su estancia en La Habana se reunió con el ministro de Finanzas, José Luis Rodríguez; con el secretario del Consejo de Ministros, Carlos Lage, y con el titular de Inversiones Extranjeras, Ernesto Meléndez. Momentos antes de volver a Madrid, Fidel Castro se entrevistó con Solchaga por espacio de 40 minutos.Solchaga viajó a Cuba acompañado del director del Servicio de Estudios de Argentaria, José Juan Ruiz, y de Fernando Eguidazu, asesor para Asuntos Internacionales de Francisco Luzón, presidente de esta corporación bancaria. Durante su estancia de cinco días en la isla participó en la conferencia que el semanario The Economist organizó para empresarios interesados en invertir en Cuba.

Sin embargo, el verdadero objetivo de su viaje fue continuar la labor de asesoría iniciada el verano pasado tras la reunión de Felipe González y Fidel Castro en Salvador de Bahía (Brasil), y, sobre todo, discutir el último informe elaborado por el equipo español -hasta ahora se han realizado tres-, en el que se establecen sugerencias sobre lo que se debe hacer a corto y medio plazo para que el proceso de reformas tenga éxito.

Solchaga plantea en este informe que una de las formas de reducir el abultado déficit público cubano -cercano a los 5.000 millones de pesos- y sentar las bases de una reforma monetaria efectiva es reestructurando y reduciendo el aparato estatal y eliminando los subsidios a las empresas estatales, subsidios que en la actualidad se tragan casi el 30% de los Presupuestos Generales del Estado.

El equipo de Solchaga considera que el Gobierno cubano debe cerrar todas las empresas improductivas y entregar a los trabajadores las empresas estatales con plantillas de menos de 50 personas, para que sean ellos mismos los que las ajusten y dirijan.

Productividad

En declaraciones a este diario, Solchaga dijo que "no se trata siquiera de vender los medios de producción", sino de entregar a los trabajadores el fondo salarial, por ejemplo, de seis meses, y que sean ellos mismos los que reestructuren la plantilla y hagan que la empresa funcione de forma eficiente. El ex ministro español agregó que, en el resto de las fábricas, el Gobierno cubano debe "ajustar la plantilla a lo estrictamente necesario" e "Introducir un sistema de estimulación en el pago que ponga en conexión los salarlos percibidos con la productividad del trabajo".Solchaga dijo que las autoridades cubanas son plenamente conscientes del problema y que saben que "sin esta reestructuración será muy difícil reducir el déficit público, y sin reducirlo es absolutamente inútil hacer una reforma monetaria. llamada a fracasar en pocos meses", pero aseguró que no sabe cómo será el ritmo de introducción de estas reformas.

Solchaga consideró ante los asistentes a la reunión de The Economist que, a pesar de que algunas medidas adoptadas en este sentido "son esperanzadoras", la lista de profesiones aprobadas hasta ahora es "insuficiente" y que el Gobierno debe agilizar "los trámites administrativos paro: autoemplearse".Por otro lado, Solchaga afirmó que el régimen cubano estudia la introducción en un breve plazo de un nuevo sistema impositivo y de aranceles, reformas que consideró importantes en las actuales condiciones que vive la isla. "Éste es un país que está haciendo un proceso de transformaciones no sólo sin ayuda exterior, sino con hostigamiento, porque ciertamente, la situación del bloqueo norteamericano supone un hostigamiento", afirmó.