Gobierno y guerrilla de Guatemala debaten la creación de una comisión de la verdad

Con el acuerdo firmado el viernes en Oslo entre representantes del Gobierno de Guatemala y de la Unión Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG) sobre el problema de los desplazados por la guerra, se dio un paso muy importante en el largo y engorroso proceso de paz que vive el país. Esto allanó el camino para abordar con optimismo el escollo mayor que ha tenido hasta ahora dicho proceso: el de la creación de un organismo, denominado Comisión de la Verdad, con el fin de esclarecer todo lo relacionado con los 45.000 desaparecidos, incluyendo la adjudicación de responsabilidades sin que ello signifique que los presuntos responsables reciban algo más que una sanción moral.Un acuerdo en este aspecto podría ser anunciado hoy en la capital noruega, lo que pondría fin con éxito a la ronda de conversaciones mantenidas desde el pasado domingo por las dos partes con la presencia, en calidad de moderador, del representante de las Naciones Unidas, Jean Arnault. El acuerdo logrado el viernes significa un principio de solución para el retorno de unos 60.000 refugiados que se encuentran en México y el reasentamiento de cerca de un millón de campesinos que durante los años de guerra se vieron obligados a dejar sus comunidades ante las sistemáticas operaciones de tierra quemada efectuadas por el Ejército, que consideraba a los campesinos como el agua que permitía sobrevivir a los peces de la guerrilla. Ambas partes agradecieron calurosamente al representante de la cancillería noruega sus esfuerzos en la búsqueda de la conciliación.

Largas negociaciones

Fue precisamente en Oslo en 1990, tras un fallido intento anterior en Madrid en octubre de 1987, cuando, bajo los auspicios de la federación luterana y el Gobierno noruego, representantes del Ejecutivo de Guatemala y la guerrilla se reunieron por primera vez para esbozar un calendario negociador. Posteriormente además del secretario de las Naciones Unidas, Otros países, España y México entre ellos, respaldaron decididamente las negociaciones de paz que desde entonces han venido sucediéndose particularmente en la ciudad de México.El Gobierno noruego aportará un millón de dólares como parte de la ayuda internacional necesaria para resolver los problemas del reasentamiento de los desplazados.

La historia de Guatemala, especialmente desde principios de los cincuenta, es de violencia y opresión. Unos 100.000 guatemaltecos, en su mayoría campesinos indígenas, han muerto en 30 años, 45.000 fueron dados como "desaparecidos" y cerca de un millón de personas, en una población de poco más de diez millones, fueron desplazadas.

El país centroamericano ha vivido 22 golpes de Estado desde su independencia en 1821 hasta 1986, cuando el democristiano Vinicio Cerezo llegó al Gobierno.