El primer ministro danés admite que los euroescépticos han ganado

Las elecciones europeas del jueves en Dinamarca han demostrado, según los resultados provisionales, que el país sigue dividido en lo que se refiere a la Unión Europea (UE). El primer ministro danés, el socialdemócrata Poul Nyrup Rasmussen, se ha negado a hacer comentarios sobre la casi segura pérdida de uno de los cuatro escaños con que contaba hasta ahora su partido en el Parlamento Europeo (PE), pero reconoce que los comicios representan una clara derrota de los partidarios de la UE en favor de los euroescépticos."Creo que los dos referendos anteriores han marcado la pauta. El electorado ha votado en base al sí o al no a la UE", declaró Rasmussen. Los daneses rechazaron en 1992 el Tratado de Maastricht y un año después lo aceptaron.

Si los grandes derrotados del jueves fueron los socialdemócratas, junto al Centro Democrático, que perdió los dos escaños que tenía en Estrasburgo, las dos formaciones políticas antieuropeas -el Movimiento de Junio y el Movimiento Popular en Contra de la UE- se pueden considerar como las grandes vencedoras, ya que las encuestas realizadas a las salidas de los colegios electorales les conceden un 26% de los votos y 5 de los 16 escaños daneses en el Europarlamento.

El ex ministro de Exteriores Uffe Ellemann-Jensen, dirigente del Partido Liberal, que mantiene sus tres escaños en el Parlamento, expresó su preocupación por los resultados. "No hay razón para estar contento si el Movimiento de Junio y el Movimiento en Contra de la UE consiguen tanta fuerza como parecen indicar los pronósticos. Será una mala señal de Dinamarca para el resto de Europa".

En Holanda, las proyecciones realizadas ayer confirman la victoria de los democristianos (CDA) con el 31% del voto y 10 escaños de los 31 que corresponden a este país. Los socialdemócratas obtienen el 23% y ocho escaños; los liberal conservadores (VVD), 17% y seis; liberales progresistas (D66), 12% y cuatro; protestantes (7% y dos escaños) y verdes (4% y un escaño).