_
_
_
_

Huye el principal testigo del atentado de la Mafia contra el juez Falcone.

La fuga durante 36 horas de Santino di Matteo, un mafioso de 40 años que había sido el primero en revelar a los jueces la génesis y realización del atentado contra el magistrado Giovanni Falcone, y el suicidio de Girolamo la Barbera, ocurrido ayer, un día después de la desaparición de Di Matteo, revelan una profunda crisis en el sistema italiano de arrepentidos, que tantos triunfos sobre la Mafia había permitido en tiempos recientes.

Así lo estiman representantes de la magistratura y de la lucha policial anti-Mafia, mientras el Gobierno tiende a quitar importancia al asunto. Di Matteo -uno de los 700 arrepentidos de la Mafia que hay en Italia, huyó el pasado jueves durante una pausa de un interrogatorio al que se le sometía en Roma. Reapareció a las 21.30 de ayer en Terni, a unos 120 kilometros de Roma, donde se entregó en una comisaría. Una versión indica que el fugitivo aprovechó que el agente que le vigilaba se ausentó para ir al baño.Resulta indudable que el arrepentido se encontraba sometido a enormes presiones famillares desde que comenzó a colaborar con la justicia, hace pocos meses. Su mujer había renegado de él públicamente, y su padre le había calificado de "cornudo infame". Es habitual, sin embargo, que las familias se distancien de los arrepentidos para evitar represalias. Ayer se supo que, desde el pasado mes de marzo, se encuentra desaparecido un hijo de Di Matteo, de 10 años, que podría haber sido secuestrado por la Mafia en un acto de represalia contra el padre.

En cuanto a Girolamo La Barbera, padre de Gioacchino, cómplice de Di Matteo en el atentado contra Falcone y también colaborador de los jueces, su cuerpo fue encontrado sobre las ocho de la mañana de ayer colgando sin vida de una viga de un establo situado a unos 15 kilómetros de Palermo. "Hasta ahora, no hay motivo alguno para sospechar que no se trate de un suicidio", comentó Giuseppe Pignatore, teniente fiscal palermitano, cuando salía de una reunión celebrada ayer por los magistrados de la capital siciliana para valorar estos dos casos.

"Es necesario aclarar cuáles serán las opciones legislativas del Gobierno en materia de arrepentidos. La incertidumbre es el mal peor de todos", dijo Antonio Napoli, miembro del organismo que coordina la lucha anti-Mafia en Sicilla. El funcionario aludía al hecho de que los arrepentidos se han sentido inseguros tras el anuncio de que el Gobierno de Berlusconi pretende revisar la legislación que les protege. La reforma tratará de hacer que la ley sea "más rigurosa, más severa, pero también más sincera", manifestó ayer el ministro de Justicia, Alfredo Biondi.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_