El presidente catalán defiende la actuación de la Generalitat en el homenaje a la Guardia Civil

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, tuvo que difundir ayer una nota en la que subrayaba el respeto de la institución que preside hacia la Guardia Civil después de que trascendiera que la consejera de Gobernación, Maria Eugénia Cuenca, no asistió a los actos de celebración del 150º aniversario de ese cuerpo el pasado domingo y dedicó la jornada al ocio familiar. Cuenca estuvo en la Costa Brava y recibió clases de golf en Pals. Pujol había excusado el lunes la ausencia de su consejera por tener un compromiso ineludible. Cuenca tenía comprometido un viaje que, finalmente, no realizó. Pese a ello no asistió al acto.En un comunicado de 30 líneas, Presidencia de la Generalitat no hace la menor mención a la ausencia de la consejera ni tampoco al acto de homenaje que se proyectaba celebrar la semana próxima. "Nadie podrá aducir ni un solo caso de desconsideración y, sí en cambio, muchos otros de explícito e inequívoco apoyo", señala la nota. Pujol recuerda que ya ha lamentado públicamente no haber podido asistir"' a los actos y que delegó en el presidente del Parlament, Joaquim Xicoy, el "segundo cargo institucional de la Generalitat y de Cataluña".

La Generalitat actuó "con corrección", señala el comunicado, que añade que sería sorprendente que "este episodio fuera utilizado injustamente" cuando la Administración autonómica "está intentando contribuir, como nadie, a mantener el clima de serenidad en Cataluña y España". "En cualquier caso, la Generalitat considera cerrado este tenia", concluía el comunicado.

Todos los grupos de la oposición en Cataluña criticaron, con mayor o menor intensidad, el comportamiento de la consejera de Gobernación. Los más suaves en sus reproches fueron los socialistas, que lamentaron el error de sensibilidad" y la "negligencia política" de Cuenca, en palabras de Josep María Sala, quien descartó que su ausencia fuese un acto deliberado.

Josep Lluís Carod Rovira, de ERC, calificó la actitud de Cuenca de "desidiosa, irresponsable y frívola". Los republicanos dicen que habrían entendido que la Generalitat hubiese decidido no ir al acto por una actitud de rechazo, hacia las fuerzas deleguridad "no catalanas, pero dado que a lo que precisamente aspira el Gobierno catalán es a ejercer el mando sobre todos los cuerpos de seguridad que operan en Cataluña, la ausencia de Cuenca fue incongruente".

Responsabilidad

El diputado de Iniciativa per Catalunya Roc Fuentes dijo que la inasistencia de Cuenca fue un hecho criticable, pero lo que es más grave, anadió, es que la justificación que dio no es cierta. Aleix Vidal-Quadras, del PP, calificó la inasistencia de Cuenca de 'frivolidad" y apuntó que, a su juicio, la consejera no ha entendido cuáles son las responsabilidades que comporta su cargo.Pujol tampoco asistió a los actos conmemorativos de la Guardia Civil al tener contraídos dos compromisos ineludibles desde hacía meses, señalaron fuentes de Presidencia. El jefe del Gobierno catalán estuvo por la mañana en Portbou. (Alt Empordá), en el acto de inauguración de un monumento en memoria del filósofo Walter Benjanún al que asistieron también los presidentes de dos lander alemanes. Posteriormente se desplazó a Perpiñán (Francia), donde se reunió con Jacques Blanc, presidente del Languedoc-Rosellón y del Comité de Regiones de Europa. Pujol llegó a Barcelona a primera hora de la noche, según Presidencia.

El director teatral Albert Boadella manifestó ayer que considera 'fantástico" el hecho de que la Guardia Civil interpretara Els segadors en el citado acto. "Parecía algo que me hubiera inventado yo", dijo el director de Els Joglars. "De hecho, cuando en una serie de televisión puse algo parecido me dijeron que estaba sonado". Boadella consideró que el hecho puede tener consecuencias imprevistas: "Yo creo que ahora sí van a tener problemas de identidad determinados nacionalistas, van a tener que tirar de psiquiatra a fondo. Ha de ser muy traumático para ellos que un guardia civil cante La Santa España".