Roldán negoció en 1992 y 1993 una operación de tráfico de armas a Angola al margen del Gobierno

Luis Roldán, ex director general de la Guardia Civil, impulsó y participó personalmente en una gran operación de venta de armas a Angola entre fines de 1992 y comienzos de 1993, que incluía baterías antiaéreas, carros de combate y cañones de diversos calibres, según informan fuentes oficiales. Varios acuerdos internacionales prohibían en aquellos meses el comercio de material de guerra con Angola. En el primer trimestre de 1-993, empresarios españoles pidieron al Gobierno luz verde para efectuar la venta. Entonces les fue denegado el permiso, pero en agosto de 1993, cuando ya no estaba en vigor la prohibición, el Gobierno dio la licencia para exportar a Angola armas por 60 millones de dólares (más de 7.500 millones de pesetas). Interior investiga además en estas semanas las relaciones de Roldán con empresas de armamento de Chile y Súráfrica.

La relación de Luis Roldán con. Angola se inició cuando, a comienzos de 1992, España aceptó encargarse de la formación de oficiales para la futura policia angoleña. Más de un centenar de oficiales angoleños, todos ellos procedentes del Movimiento Popular para la Liberación de Angola (MPLA) -grupo rival de la Unión Nacional para la Independencia Total de Angola UNITA)- fueron instruidos en el seno de los GAR (Grupos Aniterroristas Rurales) de la Guardia Civil.La formación de los mandos policiales angoleños, hecha por sugerencia de la Unión Europea, se basaba en el acuerdo de paz que fue suscrito en 1991 entre el MPLA y UNITA. Una cláusula de tal acuerdo amparado por las Naciones Unidas (denominada triple cero) indicaba la prohibición expresa de vender armas de guerra a Angola.

Tras las elecciones celebradas en septiembre de 1992, que dieron el Gobierno al líder del MPLA, José Eduardo dos San tos, UNITA optó por tomar de nuevo las armas. Fue entonces cuando dirigentes del Movimiento Popular para la Liberación de Angola viajaron a España y solicitaron colaboración y ayuda para conseguir suministros militares.

Uno de los visitados entonces fue Julián Sancristóbal, ex secretario de Estado para la Seguridad, hoy al frente de la sociedad Etefisa (Estudios Técnicos Financieros, S A).

Julián Sancristóbal afirma que respondió negativamente a sus interlocutores angoleños, porque, según indica, jamás ha querido participar en negocios de tráfico de armas. Preguntado si puso en contacto a sus visitantes con otros asesores, Sancristóbal lo niega y, al referirse a Luis Roldán, señala que nunca ha tenido relaciones comerciales con el ex director general de la Guardia Civil.

Un dato, en cualquier caso, les relaciona directamente a ambos: Elisa Rodríguez, la que fuera amante de Luis Roldán tras la ruptura de su primer matrimonio con Ángeles Cimorra, trabajó como secretaria de Sancristóbal al menos durante un año a finales de la pasada década. Fue el ahora prófugo de la justicia quien pidió a Julián Sancristóbal que emplease a Elisa Rodríguez.Encargo directo

A fines de 1992, y por encargo directo de Luis Roldán, varios altos mandos de la Guardia Civil, incluido algún general, elaboraron un detallado informe sobre las necesidades armamentísticas del Gobierno de Angola para hacer frente a la guerrilla de UNITA. Fuentes oficiales aseguran que los mandos de la Guardia Civil no supieron nunca que realmente estaban trabajando para una posterior operación mercantil. Estas fuentes agregan que el trabajo se hizo totalmente al margen del Ministerio de Asuntos Exteriores, que entonces supervisaba directamente las relaciones de colaboración entre España y Angola.

Las fuentes oficiales consultadas al respecto recuerdan que, entre finales de 1992 y principios de 1993, Luis Roldán se entrevistó en su propio despacho oficial con el entonces ministro angoleño de Asuntos Exteriores, Van Dunen Loy, y con un conocido personaje relacionado en numerosas ocasiones con el tráfico de armas.

Las personas informantes de la operación desconocen los trámites que realizó Luis Roldán al respecto, pero recuerdan que varias empresas españolas de armamento, tanto públicas como privadas, elaboraron en la primavera de 1993 un plan para suministrar diferentes tipos de armas a Angola.

Cuando la operación estaba en marcha, uno de los empresarios afectados se dirigió al Ministerio de Asuntos Exteriores, según confirman en este departamento, para solicitar una autorización de venta de armas a Angola por valor de varios miles de millones de pesetas.

Tras un largo debate, que se prolongó durante toda una mañana, el Ministerio de Asuntos Exteriores respondió negativamente. No obstante, las hostilidades de UNITA contra el Gobierno legal angoleño modificaron las posiciones internacionales y en julio de 1993 quedó suspendida de hecho la cláusula triple cero.Sorpresa para Asunción

Al mes siguiente, el Gobierno concedió a la empresa Defensa y Exportación (Defex) una licencia para exportar armas a Angola por valor de 60 millones de dólares. Las entregas, según fuentes del sector, aún no se han materializado.

La relación de Roldán con el mundo de las ventas de armas ha sido una de las sorpresas con que se encontró el anterior ministro del Interior, Antoni Asunción, a los pocos días de iniciarse el pasado mes de marzo una investigación oficial interna sobre las actividades del ex director general de la Guardia Civil.

Hasta el momento, se desconoce si esta investigación interna ha llegado a alguna conclusión concreta. Sí ha trascendido que empresas de armamento radicadas en Chile y en Suráfrica han sido investigadas en relación con Roldán y que, en ese contexto, ha sido citado en varias ocasiones Sancristóbal. Éste, por su parte, no sólo niega relación comercial alguna con Roldán, sino que insiste en que no participa jamás en negocios de venta de armas y que tampoco ha gestionado operación alguna con Chile, Suráfrica o Angola.Información elaborada por Carlos Yárnoz y Francisco Mercado.