Concejal busca quiosquero osado
La Junta Municipal de Usera regala el primer año a quien instale un chiringuito en el parque de Pradolongo
Las rebajas llegan al Ayuntamiento de Madrid. La Junta Municipal de Usera ha decidido lanzar una oferta para conseguir que algún empresario instale un chiringuito en el parque de Pradolongo del distrito. La concesión de un quiosco de bebidas, que antes valía 800.000 pesetas, ahora cuesta la mitad. Además, en esta promoción especial, el primer ano sale gratis. La Junta de Usera espera que no quede desierto el segundo concurso, ya que al primero no se presentó nadie.El concejal del distrito, Miguel Ángel Araújo, del Partido Popular, susurra: "Es que el parque tiene mala fama y por eso nadie se interesó en instalar aquí un quiosco". El parque de Pradolongo es el tercer jardín más grande de Madrid, después de la Casa de Campo y el Retiro. En su extensión, de 60 hectáreas, se puede hacer de todo menos tomarse un vermú o un refresco. Los vecinos y el Ayuntamiento echan en falta un bar en el parque.
"No es malo que alguien ponga aquí un quiosco para tomar algo", decía un vecino de 60 años que todos los días suele pasear por el parque. Según la junta municipal, además, de esta forma se podría ayudar a resolver el problema de inseguridad que hay en esta zona de Madrid.
En el mes de enero, la junta convocó el primer concurso de adjudicación de los cinco quioscos que se van a situar en la orilla del lago del parque. Pero la bahía de Pradolongo no es la costa de la Castellana. En el centro, aunque la concesión valga cuatro millones de pesetas, hay bofetadas por adquirir el quiosco. En el distrito de Usera, sin embargo, nadie se ha interesado en instalar el bar a pesar de que los precios son los más asequibles de Madrid: 800.000 pesetas al año de canon para el quiosco durante un decenio.
Concurso desierto
Pero el concurso quedó desierto porque, según los propietarios de bares de Orcasitas y Usera, la zona no es idónea para instalar allí un bar. Ahora, la junta ha sacado el nuevo pliego de condiciones y ha tirado la casa por la ventana para intentar que se levante algún bar en el corazón de este parque.La oferta es atractiva: los interesados no pagarán nada el primer año, y el resto de las temporadas tan sólo abonarán 400.000 pesetas por los 12 meses.
Según el concejal del distrito, Miguel Ángel Araújo, hay que darle color al parque, y una extensión de esas dimensiones necesita un lugar donde tomarse una coca-cola, como ocurre en el Retiro. El edil asegura que ya ha hablado con hosteleros que parecen interesados y animados en el proyecto con la disminución de precios que se ha producido.
Félix López Rey, concejal de Izquierda Unida, asegura que la mala fama del parque y la escasa publicidad provocaron que el primer concurso quedara desierto. "Si es conveniente que se regale el primer año, lo vamos a apoyar, porque hay que dar vida al barrio", añade López Rey, quien de paso va a ver cómo por fin también habrá urinarios en el parque, algo que llevan pidiendo desde hace un año.
Algún empresario del distrito de Usera ya está interesado en el proyecto, sobre todo porque el concejal se ha dedicado a promocionar el nuevo concurso entre los hosteleros.
El propietario del bar del Club Moscardó, que ya ha tenido una conversación con el concejal, dice que lo está pensando: "Ya veremos a ver lo que hacemos, pero él tiene mucho interés en que alguien se instale, y si hay que hacerlo, lo llevaremos a cabo".
El concejal del distrito, Miguel Araújo, también tiene una explicación para el escaso interés que muestran los profesionales del sector: "Yo sé que cuando se pasa la orilla del Manzanares, los hosteleros no están interesados en un proyecto y por eso me tengo que dirigir a la gente del barrio".
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