"Tenemos 6.000 yacimientos arqueológicos en la región"
Miguel Ángel Castillo, de 43 años, era un tranquilo profesor universitario de Historia del Arte que un día decidió meterse en política. Desde 1991 es director general del Patrimonio de la Comunidad de Madrid, y, por tanto, el máximo responsable de la conservación de la riqueza patrimonial de la región. "Algo bastante complicado porque los presupuestos [este año su departamento maneja más de 4.000 millones de pesetas] nunca son suficientes", señala cautelosamente. Educado, devorador de libros, diplomático, detallista y reservado, al hablar se muestra algo apesadumbrado por los asuntos que se acumulan en su departamento.
Pregunta. ¿Le desborda el trabajo?
Respuesta. (Vacila). Tenemos abiertos cinco grandes programas de actuaciones: bibliotecas, archivos, patrimonio documental, infraestructuras y patrimonio histórico. A veces, todo parece demasiado.
P. Y, encima, le aparecen yacimientos espontáneos, como el de Parabaña.
R. No, esa necrópolis visigoda la teníamos perfectamente catalogada. Digamos que el alcalde precipitó los hechos al hacerla pública.
P. Estaría catalogada, pero no demasiado vigilada.
R. Los hechos nos han dado desgraciadamente la razón. La mejor seguridad es la confidencialidad. Dos de las tumbas de la necrópolis fueron destrozadas, al ser de dominio público su existencia.
P. Pero, le repito, no estaban muy vigiladas.
R. Mantenemos unas cordiales relaciones con las fuerzas de orden público. Además, en Carabaña estaba la Policía Municipal.
P. ¿Cuántos yacimientos arqueológicos están catalogados en la Comunidad de Madrid.
R. En la carta arqueológica que terminaremos este año [se trata de un mapa en el que los especialistas han trabajado durante cuatro años y en donde están registrados todos los yacimientos de la región] se han contabilizado unos 6.000 yacimientos.
P. Esta carta será la joya de los expoliadores.
R. Su acceso será sumamente restringido.
P. ¿Cuál es el presupuesto de su dirección general
R. Unos 4.000 millonesde pesetas. Las partidas presupuestarias que se destinan nunca son suficientes. Hay otras prioridades. Sería bueno que en este mundo entrase la iniciativa privada. Para las empresas resultaría una inversión muy rentable.
P. En concreto, ¿cuál es el presupuesto para excavaciones?
R. Para las de urgencia contamos con unos 30 millones.
P. No parece mucho.
R. Es suficiente.
P. ¿Cuántos alcaldes le han visitado con problemas en su patrimonio histórico?
R. Yo creo que ya conozco al 70%. Pero es normal, cada uno intenta hacer lo mejor para su pueblo. A veces tengo que desengañarles y explicarles que la presunta joya patrimonial del pueblo no es tal, que a lo mejor en otra ocasión. Es duro.
P. ¿Existe en Madrid un mercado negro de obras de arte?
R. Sí, como en cualquier otra ciudad del mundo, aunque no muy desarrollado. Las autoridades han conseguido que no sea rentable. De todas formas, vamos a intentar introducir en el próximo Código Penal el delito contra el patrimonio.
P. ¿Cuál es su gran sueño profesional?
R. Que los madrileños tengan tantas bibliotecas como el resto de los europeos y aprendan a respetar el patrimonio. Levantamos entre 10 y 15 salas de lectura y bibliotecas en la región cada año. Sólo en la capital tenemos problemas, porque el Ayuntamiento no da facilidades. En mayo inauguraremos una de las mayores, la de Puerta de Toledo. Tendrá cabida para casi 80.000 volúmenes. El Ayuntamiento sólo ha puesto el suelo. Nosotros hemos invertido 600 millones.
P. No me diga que la cultura depende de la ideología.
R. Jamás se me ocurriría.
P. ¿Conocen los madrileños su patrimonio?
R. Cada vez más. Hace unos meses editamos un libro sobre los castillos de la región y se agotó a los pocos días. Le digo, con el corazón, que el trabajo continuo de esta consejería está calando en los ciudadanos.
P. ¿Queda mucho por hacer?
R. No se lo imagina.
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