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PSOE e IU aceptan que la Asamblea se asiente en un solar 'solidario' de Vallecas

Javier Casqueiro

El alcalde no cede, y el presidente de la Comunidad se considera, en la búsqueda de un lugar para la nueva Asamblea de Madrid, simplemente un "intermediario cualificado". El futuro Parlamento regional tiene todas las papeletas para acabar erigido sobre uno de los escasos solares que quedan por edificar en Madrid Sur, un ensanche de Puente de Vallecas. Las obras deberían empezar en otoño y costarían menos de 2.000 millones. IU y PSOE parecen estar de acuerdo en que trasladar a la periferia una institución como la Asamblea es "solidario y reequilibrador".

José María Álvarez del Manzano sí ha cedido al menos a dos presiones en el proyecto de la Asamblea sobre la Maternidad de la calle de O'Donnell: a las 5.600 alegaciones presentadas por vecinos y afectados y a los informes contrarios de su departamento de Circulación.En la Comunidad, sin embargo, todo el mundo parecía estar de acuerdo. Los tres grupos parlamentarios (PSOE, PP e IU) apoyaron la iniciativa por unanimidad en una proposición de ley; el consejero de Salud Pedro Sabando, responsable de la Maternidad, preparó un plan de traslado para estas dependencias, y hasta ocho damas de honor y mérito, las religiosas propietarias de la iglesia y del colegio de la Paz situados en las inmediaciones, habían concedido la cesión de unos suelos imprescindibles.

El poder de los médicos

Nadie contó con el poder intimidatorio de los médicos de la Maternidad. Las acusaciones desde el Gobierno regional contra este sector llegan a asegurar que han utilizado sus consultas para recaudar firmas de adhesión contra la ocupación que se pretendía para la Asamblea. Pero la Maternidad, en cualquier caso, debe ser rehabilitada por su mal estado.

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El Ayuntamiento, además, nunca ha estado convencido de la bondad de este proyecto. El alcalde habría dado su visto bueno, en todo caso, a la urna acristalada que se proyectó para albergar el hemiciclo de los 101 diputados autonómicos y el inmueble para acoger a los 100 funcionarios que los atienden. Ése es el planteamiento del PP.

La oficina de proyectos institucionales de la Comunidad, sin embargo, diseñó una operación más completa, sobre una gran manzana, con un superflicie construida de 31.500 metros cuadrados que se rebajó un 10% por imposición municipal. En ese espacio los arquitectos autonómicos añadieron un edificio con dos consejerías que fue bloqueado por el Ayuntamiento.

Toda esta polémica es ya pasado desde la reciente comida entre el alcalde y Joaquín Leguina. En esa cita no hubo avances y no parece que el obstáculo pueda desvanecerse a pesar de que ambos se prometieron "darle una vuelta más" al problema. Leguina ya le anunció al presidente de la Asamblea, Pedro Díez, que apoyaría la solución de Vallecas. Díez presentará la próxima semana esta solución a los portavoces de los partidos y a la Mesa del Parlamento. Los dos solares de Madrid Sur no precisan recalificaciones. Las obras, con la oportuna licencia, podrían empezar tras el verano. El coste sería incluso inferior a los 2.000 millones preparados para O'Donnell, porque se ahorrarían los 60 previstos para demoler la Maternidad.

Un rechazo con la boca pequeña

Isabel Vilallonga, portavoz de IU, ya ha anunciado su apoyo a la iniciativa de llevar la Asamblea de Madrid a Vallecas, que cuenta con el visto bueno de más de 30 asociaciones de ese barrio. El presidente del Parlamento, Pedro Díaz, Vilallonga y diputados del PSOE entienden que ese traslado sería "solidario y reequilibrador" y una "apuesta progresista por una opción descentralizadora de la ciudad".El PP no es que se oponga a esta solución, pero tampoco la apoya: "Rechazada la proposición aprobada unánimemente para ir a O'Donnell, habrá que estudiar otras y no la que diga el presidente del Parlamento".

Algunos diputados, y de todas las formaciones, son reacios, en el anonimato, a colocar la sede de la Asamblea -de por sí poco identificada por los madrileños- en la periferia de la ciudad. "Debería estar en el centro, ni en Vallecas ni en La Moraleja, pero es difícil mantener que no vaya a Madrid Sur sin que te acusen de elitista", es la opinión más generalizada.

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Sobre la firma

Javier Casqueiro
Es corresponsal político de EL PAÍS, donde lleva más de 30 años especializado en este tipo de información con distintas responsabilidades. Fue corresponsal diplomático, vivió en Washington y Rabat, se encargó del área Nacional en Cuatro y CNN+. Y en la prehistoria trabajó seis años en La Voz de Galicia. Colabora en tertulias de radio y televisión.

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