Hora y media para interpretar a 50 personajes
Siete historias distintas, casi cincuenta personajes y una sola persona encima del escenario. Y, sobre todo, humor. El actor Pepe Rubianes llegará la próxima semana al teatro Alfil con una obra de título onomatopéyico, Ssscum, que él mismo define como un canto al desencanto en clave de humor. En este trabajo, como ya es costumbre en él desde que hace 11 años decidió trabajar en solitario, además de intérprete es autor del texto."¿Ssscum? Es el símbolo de los latidos del corazón en momentos de tensión", explica Rubianes. Pero el título no tiene nada que ver con la función, como las siete historias que la componen tampoco tienen ninguna conexión entre ellas, si acaso que todos los protagonistas son seres fracasados. "De la tragedia desvirtuada viene el humor", dice Rubianes.
Aparecen una madre gallega, un pirata del siglo XVI, un hijo que quiere volver al seno de su madre, un cuarentón con su veinteañera, el facha de toda la vida... "Es un retrato de la calle, agrio como la vida misma", apunta Rubianes. Antes de dedicarse a este tipo de espectáculo, del que posiblemente ahora sea el único representante, trabajó en compañías de teatro como Dagoll Dagom.
Tantos papeles para un solo actor, que en la hora y media de función no sale ni una vez del escenario, requieren buenos recursos. Los de Rubianes son a base de mimo, pantomima, sonidos onomatopéyicos, improvisación, "cámara negra, luces y yo".
Ssscum, en el teatro Alfil (Pez, 10), del 6 al 24 de abril. De martes a domingos, a las ocho de la tarde. 1.800 pesetas.
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