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Registrada la sede de Forza Italia en una investigación sobre masonería y delincuencia

Un nuevo golpe de efecto vino a añadir tensión a la crispada campaña electoral italiana, sólo cuatro días antes de la celebración del voto. Un juzgado de Calabria que investiga desde hace meses presuntas relaciones de la masonería no oficial con las mafias italianas ordenó ayer el registro de la sede romana de Forza Italia y la requisa de todas las listas de candidatos. Tras el registro, el presidente de la República, Oscar Luigi Scalfaro, lanzó un claro llamamiento a la magistratura para que no interfiera en la campaña electoral.

"Los magistrados no pueden considerarse fuera del tiempo", dijo Scalfaro. "Hay que tener en cuenta que estamos en vísperas de unas elecciones que tienen objetivamente un carácter delicado". Nunca un presidente de Italia había dicho algo que pudiera interpretarse como una inteferencia tan clara en la labor de los jueces.El propio Consejo Superior de la Magistratura (CSM), el órgano autónomo por el que se regula la justicia italiana y que preside el jefe del Estado, consideró ayer inoportuna y gratuita la decisión de Maria Grazia Omboni, la juez de Calabria que ordenó el registro de Forza Italia. La magistrada ha sido convocada para que explique estos hechos.

Todo ello puede ser considerado como una clara victoria de Silvio Berlusconi, el presidente de Forza Italia, que en la mañana de ayer había pedido una entrevista con el presidente de la República, Oscar Luigi Scalfaro. "Sin justificación alguna, sin siquiera indicios de delito, la policía visita las sedes de Forza Italia. Por orden de un magistrado se nos piden las listas de candidatos y dirigentes. Éstas son cosas que suceden únicamente en los países totalitarios", afirmó Berlusconi en una nota publicada para informar sobre su petición de entrevista a Scalfaro.

Comisión antimafia

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Berlusconi consiguió, también ayer, la dimisión del presidente de la Comisión Parlamentaria Anti-Mafia y diputado de la izquierda, Luciano Violante, que el pasado martes dijo que la magistratura de Catania investigaba al propietario de Fininvest por presuntos delitos de tráfico de armas y drogas.

Berlusconi pidió ese mismo día el cese de Violante por utilización ilegítima de un cargo institucional con fines electorales Violante que desautorizó la entrevista en la que daban tales in formaciones, dimitió ayer, a fin de gozar de plena libertad para desarrollar su campaña sin limitaciones institucionales, según dijo. El dimisionario es un exjuez que goza de gran prestigio.

El registro de ayer se une a los realizados la semana pasada en las oficinas de Finnivest en busca de supuestas facturas falsas, y a las acusaciones de presuntas conexiones con la Mafia de Marcello dell'Utri, el más estrecho colaborador de Berlusconi, que toda la prensa italiana ha recogido. Hasta el momento no se ha confirmado ninguna investigación oficial ni se han dictado órdenes de detención al respecto.

Las expresiones de solidaridad más fuertes hacia el líder de Forza Italia y dueño de Fininvest vinieron de Marco Pannella, el fundador del Partido Radical, que días atrás, en una reunión con corresponsales extranjeros, anunció que "la izquierda haría de todo, e incluso llegaría al asesinato, moral o físico", si llegaba a la convicción de que Berlusconi iba a ganar las elecciones. Berlusconi pidió a sus seguidores que "donde sea posible" voten por las listas de Pannella.

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