Los precios no variaron en febrero gracias a los descensos en alimentos y servicios

El índice de precios al consumo en febrero no sufrió variación respecto al mes anterior, lo que supone un cierto respiro para el objetivo del Gobierno de terminar el año con una inflación del 3,5%. El buen comportamiento de los precios de los alimentos, que descendieron en seis décimas, sirvió para compensar exactamente al resto de los componentes de los precios. La inflación subyacente, que excluye los alimentos no elaborados y los productos energéticos, bajó dos décimas y se ha colocado por debajo del índice general.

La evolución del índice de precios al consumo en febrero ha sido mejor de lo esperado tanto por la Administración como por los expertos de los mercados de capitales. En todos los casos se esperaba una ligera subida, en torno a una o dos décimas, que no haría sino empeorar las posibilidades de alcanzar el objetivo de inflación establecido para el conjunto del año. En febrero de 1993 la variación de precios fue nula y ello arrojaba dudas sobre que se pudiera volver a repetir el fenómeno.El comportamiento de los alimentos -que han roto su tendencia alcista de final de 1993 y de enero de este año, y cayeron seis décimas sobre tos niveles alcanzados un mes antes- han equilibrado la evolución de los demás componentes del IPC arrojando como resultado un crecimiento nulo. De esta forma, la inflación acumulada en los dos primeros meses de 1994 se coloca en el 1,1% y la tasa interanual -que mide la evolución de los doce últimos meses- permanece en el 5% igual que hace un mes y una décima por encima del cierre de 1993.

Junto a la caída de los alimentos se ha vuelto a la tendencia a la baja de la inflación subyacente , que fue muy pronunciada el año pasado y que se había interrumpido en enero provocando una cierta inquietud sobre su evolución futura. En febrero la inflación subyacente, que mide la tendencia futura de los precios, bajó dos décimas de forma que la tasa interanual se ha colocado en el 4,9%, por debajo del nivel del índice general, lo que se interpreta como una buena señal de futuras reducciones más generales. El pasado mes, la inflación subyacente ha alcanzado, por otra parte, un mínimo histórico.

La reducción de los precios de los servicios siguió su marcha en febrero de forma que la tasa interanual de los servicios sin alquileres cayó medio punto hasta el 5,9% en un proceso de acercamiento a la variación de los precios industriales, aunque estos siguen bastante más bajos aún.

"Lo mejor de la inflación de febrero es que es neutra", dice Guillermo Kessler, de AB Asesores, "y ha roto los temores que había a un posible repunte". A partir de ahora hay que esperar a la evolución de abril y mayo, "donde hay un margen mayor de bajada, dado lo que ocurrió en 1993", señala Kessler.

Según la nota difundida ayer por el Ministerio de Economía y Hacienda, "si se confirma la moderación en los aumentos salariales del presente ejercicio, es previsible que la tasa anual de inflación descienda significativamente a lo largo de los próximos méses". Ello haría posible, añade el comunicado, "una mejora de las rentas reales de las familias y el mantenimiento de la competitividad de nuestras empresas frente a los competidores".

Para CC OO la moderación de los precios de febrero se explica exclusivamente por la evolución de los alimentos, sobre todo por los no elaborados, "mientras que el resto de capítulos continúan mostrando una resistencia inalterable a la baja". Para el sindicato lo importante es que el IPC de los dos primeros meses del año "supone ya el 31% de la previsión para todo el año" mientras que hace un año este porcentaje era menor.

Para la patronal CEOE el dato de inflación en febrero es "positivo porque los precios se están desacelerando donde más incrustada estaba, como era en el sector de servicios". La patronal considera, no obstante, que los precios en España siguen siendo el doble que en la mayoría de los países comunitarios.

Los precios en Francia crecieron el 0,3%, situándose la tasa interanual en el 1,8%, en la banda alta de las previsiones. En Portugal, por su parte, los precios cayeron una décima y la interanual está en el 6,2%.